La Liga MX nos da capítulos inesperados (irreales y chafas) cada año. El del 2018 lo protagonizan los Lobos BUAP y acá te explicamos, paso a paso, por qué descendieron e irónicamente, por qué todavía se pueden salvar.
El tema económico.
El primer paso para que Lobos descendiera fue la falta de liquidez por parte de la directiva. Cuando empezó el Apertura 2017, los licántropos maravillaron a todos con tres victorias consecutivas, goleadas que los hacían ver como candidatos para la liguilla pero realmente fue un inicio motivador y nada más.
Después los poblanos comenzaron a cavar su propia tumba, sin perder el estilo que Rafa Puente Jr. siempre mantuvo de ser ofensivos pero sí con muchas carencias de medio campo para atrás, más allá de que llegaron jugadores de experiencia como Juan Carlos Medina, Francisco Javier Rodríguez o Carlos Adrián Morales.
Aún sin mantener regularidad, sumaron la maravillosa cantidad de 23 puntos, de la mano del técnico mexicano; el mismo que después despedirían por falta de resultados.
Lobos fue y le ganó a Chivas en Guadalajara, goleó a Monterrey, Cruz Azul, Pachuca, Querétaro y siempre mostró la cara de un equipo que peleaba hasta el final.
La indisciplina.
Hablando del bajón que tuvieron los Lobos en el Apertura 2017, en gran parte se debió a la falta de disciplina de jugadores como Julian Quiñones, William Palacios y Luis Quiñones.
En un par de ocasiones los delanteros fueron separados del primer equipo y aunque Julian había sido el goleador de los poblanos, la directiva mantuvo el castigo por algún tiempo, sin que fuera convocado para los partidos, perdiendo gran peso en su ofensiva.
Incluso Luis y Palacios fueron dados de baja de manera definitiva del club. Ahora Quiñones es parte del Toluca líder y con una racha impresionante de triunfos, en Liga.
Los refuerzos.
El tercer error, que va de la mano con el primero, fue la llegada de muy pocos refuerzos y la calidad de los mismos. Al club llegaron cartuchos quemados como Jerónimo Amione o Facundo Erpen. También consiguieron préstamo de jugadores que no tuvieron cabida en equipos ‘grandes’, como Luis Márquez y Manuel Pérez.
Rafa puso sus esperanzas en Gabriel Cortez, Irving Zurita e Irven Ávila pero los tres futbolistas tardaron mucho en ‘adaptarse’ y cuando empezaron a dar pinceladas de su buen futbol, parecía ya demasiado tarde.
En un total de 11 partidos, Cortez ha marcado 2 goles, mientras que Irven no ha podido romper las redes y Zurita, no tuvo tantas oportunidades como hubiera querido.
Los demás equipos, con una economía más importante, no sólo se reforzaron mejor, sino que entendieron que el juego ofensivo de los poblanos era fácil de contrarrestar.
La salida de Rafa Puente.
Si de por si no se veía por dónde podían levantar, la directiva decidió correr o ‘cesar’ como ellos le dicen a Rafa Puente, el técnico que los ascendió en un año y en el que los jugadores confiaban ciegamente.
En su lugar se quedó el ‘Borita‘ Alcantar (que no tiene la culpa de nada en lo futbolístico) pero su inexperiencia y la poca conexión con los jugadores terminó por pesar más, para que no ganara ni un solo punto en los tres encuentros que ha dirigido. Es más, Lobos ni siquiera ha hecho gol con él al mando.
Rafa se fue por la puerta de atrás, triste y dolido, pero seguro de que sus Lobos se mantendrían en Primera División, más allá de que él no seguiría.
A falta de una fecha eso ya no es posible, al menos matemáticamente y es que aunque no lo creas, Lobos todavía puede seguir aullando en Primera División.
120 millones los separan de la salvación.
Con dinero baila el perro, aunque en esta ocasión sería el lobo. Resulta que de los tres equipos que están peleando por ascender a la Liga MX, sólo uno cumple con los requisitos (de la Femexfut) para tener un club de primera y son los Leones Negros de la Universidad de Guadalajara. Otro equipo que nomas subió un año y se fue.
Es por eso que los Lobos deberían pagar una cantidad de 120 millones de pesos, que no tienen por ahora, para quedarse por lo menos un año más en el máximo circuito.
Si Leones Negros cae, la final del Ascenso sería entre Cafetaleros de Tapachula y Alebrijes de Oaxaca, por lo que ninguno podría ascender, de acuerdo a lo que establecieron los dueños del futbol mexicano a principios de la temporada.
Y si Lobos no consigue el dinero, entonces se haría una revoltura en la que lo único que importa es el dinero, ya que Celaya podría ascender por haber hecho la mayor cantidad de puntos en el año futbolístico, siempre y cuando si paga los 120 millones de pesos.
Pues habrá que esperar a que finalice el Ascenso MX y la Liga MX pero no va a estar nada sencillo el tema del descenso.
