Oswaldo Alanís es la más reciente baja de la Selección Mexicana de Futbol. Un defensa central que en sus mejores épocas demostró un muy buen nivel pero que en la actualidad un retiro se ve más cercano que una recuperación total.
Alanís debutó con Estudiantes Tecos en 2009 al mando de Miguel ‘Piojo’ Herrera. Desde ese momento demostró que tenía las condiciones para jugar en la Liga MX. Su estatura y porte le ayudaron a colocarse como una de las promesas del futbol mexicano.
Su buen nivel lo llevó a Santos en el 2012, donde se hizo de la titularidad y de notoriedad en el futbol mexicano. Se proclamó campeón con el equipo lagunero, que en esos años era de lo mejor que ofrecía la liga.
Además, se hizo de un lugar en la Selección. Fue del equipo que ganó la Copa Oro en 2015, pero desde ese año comenzaron las lesiones. Una molestia en la espalda lo marginó y de ahí las cosas de plano no levantan.
Pasó a Chivas para llenar un gran hueco que tenían en la defensa central pero simplemente no ha podido hacerlo. Fue una contratación de la cual se esperaban cosas grandes. Empero, desde el noviembre del año pasado tiene una lesión en la rodilla izquierda que simplemente no lo deja.
En julio de este 2016 se tenía planeado su regreso, pero le salió un esguince en la misma rodilla. Ahora, tenía la oportunidad de jugar con el Tri y mostrarse como opción para Juan Carlos Osorio. Una molestia en el músculo abductor del muslo derecho lo dejó fuera del conjunto nacional.
Nadie sabe si es mala suerte, falta de preparación física o simplemente que su cuerpo ya no quiere jugar. Lo que sí es que la carrera de Oswaldo Alanís es un caso triste y que con 27 años de edad un retiro temprano no suena tan descabellado.
***Fotos Mexsport
