Comenzó la reestructuración en Chivas (por millonésima vez) y los cambios empezaron en la plantilla, pues le dieron las gracias al jugador mejor pagado del equipo… Oribe Peralta. El ‘Cepillo’ fue uno de los fichajes “bomba” en 2019, pero pasó con más pena que gloria.
Sí, Chivas necesita hacer todo para construir de nuevo un equipo, porque no tiene ni pies ni cabeza y la Liga MX es tan benevolente que le permite aspirar a calificar a la liguilla y es por eso, que muchas veces se minimiza el fracaso de los equipos.
Pero un equipo grande no puede permitirse tantos torneos sin llegar a una final, porque de ser campeón mejor ni hablamos porque Chivas sale aún peor parado. Sí, los jugadores son mayormente culpables, al final del día, son ellos los que están dentro de la cancha.
La cosa es que después de varios años, torneos y fracasos, la cosa ya no sólo es de los jugadores sino también de los que orquestan todas las decisiones en el equipo. Directores deportivos y DT’s pasan, pero nadie tiene una solución y menos cuando son los directivos los que hacen los fichajes como el de Oribe Peralta.
No es que tengamos algo en contra de Oribe Peralta, porque no es así, de hecho, es uno de los menos responsables porque sólo estuvo unos cuantos minutos dentro del campo en todos los fracasos de Chivas. Pero, si podemos culpar a los directivos que decidieron ficharlo.
Es un gran delantero, sí. Te iba a solucionar los problemas en ofensiva, no. Oribe Peralta había dejado de ser titular con América y vivía sus últimos momentos, pero Chivas decidió darle una oportunidad y lo convirtió en el fichaje para el 2019, algo que criticaron los aficionados.
Ver esta publicación en Instagram
El fracaso del fichaje de Oribe Peralta
Oribe Peralta llegó en 2019 a Chivas, el primer pecado es que llegó procedente de América, el acérrimo rival y eso no fue bien visto entre los aficionados. Desde el primer momento del fichaje, se sabía que era arriesgarse demasiado porque sus mejores años como delantero, habían pasado.
Con Chivas sólo estuvo en 40 partidos y jugó mil 469 minutos en dos años, lo que vienen siendo cuatro temporadas con el ‘Rebaño’ Sagrado. En todos estos minutos sólo hizo dos goles en su paso por el club y tres asistencias. O sea, hizo un gol cada 734.5 minutos, lo que vienen siendo un gol cada 8 partidos, aproximadamente.
Sí era un delantero ya en las últimas de su carrera, no se le puede exigir como en su momento a un JJ Macías o como a Alexis Vega en el equipo, pero lo curioso es que, con esos números, era el jugador mejor pagado de toda la plantilla de Chivas.
Sí, de acuerdo a Salary Sport, Oribe Peralta en su último año como jugador, ganaba 28.5 millones de pesos, poco más poco menos, al año. Un jugador veterano y a punto de retirarse, como el mejor pagado de toda la plantilla, no es un buen negocio. Tal vez el problema no está en la cancha, pero sí en las decisiones de los de pantalón largo.
