Después de más de dos décadas, la NFL regresa a Los Angeles. Como se hizo oficial hace unas horas, los Rams se mudarán a la cuidad de California. Pero ¿qué significa para los Chargers y Raiders que también querían irse a LA?
St. Louis es la primera ciudad que pierde a su equipo por mudanza desde que los Oilers se fueron de Houston en 1997. Por esto, aquí están las claves y consecuencias de esta noticia:
¿En dónde jugarán los Rams?
El nuevo estadio será terminado hasta el 2019 en Inglewood, por lo que el equipo tendrán que utilizar el Los Angeles Memorial Coliseum como hogar en el 2016. El histórico recinto ya ha sido su casa, desde la temporada 1946 hasta 1979, cuando se mudaron al Anaheim Stadium.
Las instalaciones se llamarían City of Champions Stadium, esto hasta que una marca lo patrocine y ponga su nombre.
Desde el 2004 los Rams no han aparecido en los playoffs, por lo que el apoyo de los fanáticos había bajado y en consecuencia, los dueños buscaron un mercado nuevo.
Los Chargers
El equipo que está actualmente en San Diego tiene la opción para mudarse a Los Angeles. La decisión tiene una fecha límite del 16 de enero del 2017 y esta tiene dos opciones: ser socios con los Rams para construir o rentar el estadio. Sin embargo, si los Chargers se quieren ir a LA desde esta temporada tienen que hacerlo antes de abril, cuando se da a conocer el calendario y comienza la venta de boletos.
La problemática es que en San Diego se tendrá una votación en junio para saber si se le da a la franquicia 350 millones de dólares para un nuevo recinto. El CEO del equipo, Dean Spanos, tiene que pensar muy bien las cosas. Él mismo dijo que le gustaba el proyecto en Carson, mismo que se reportó cerca de concretarse esta tarde.
Los Raiders
Los ‘Malosos’ quedaron fuera de la jugada y el dueño, Mark Davis, no se vio contento con esto. Su idea era ir a LA o quedarse en Oakland, aunque esta última opción no le emocionaba. Empero, se rumora que Davis y los Raiders recibirán de parte de la liga una suma que se aproxima a los 500 millones de dólares para que construyan un nuevo estadio. También se ha especulado con la posibilidad de irse a San Antonio, aunque esa se ve bastante lejana.
Por otro lado, los Raiders están en una situación similar a la de los Rams. Desde el 2002 no han jugado un partido de postemporada y el apoyo ha disminuido.
A pesar de que el anuncio despejó algunas dudas, aún queda muchas preguntas sin respuesta.