Llegó el día que todos los aficionados mexicanos al futbol americano esperaron por 11 años. Gracias a Banorte, el banco oficial de la NFL en México, los Houston Texans y los Oakland Raiders están en el Estadio Azteca listos para regalarnos un espectáculo.
Vaya que la vida es bella cuando puedes ver que en México se llevará por primera vez en la historia un Monday Night Football fuera de Estados Unidos. Ahí es cuando te das cuenta de la importancia que tiene nuestro país para la NFL.
Aunque parezca algo no tan importante, además el clima está perfecto. Tláloc parece que no saldrá a dar lata hoy y así, el partido seguro se pondrá mejor.
¡Y los Raiders pisaron la cancha del Estadio Azteca para calentar!
Y los fans, la Raider Nation no se hizo esperar en el Coloso de Santa Úrsula. Miles y miles de seguidores de Oakland se disfrazaron como se acostumbra. Además, la flama de Al Davis, como se hace en su estadio, está encendida.
Sí, los seguidores de los Raiders son más por cantidad, pero eso no significa que eso los haga ganar ante los de los Texans ni mucho menos, sino aquí una prueba.
Y comenzó el partido amigos y el primero que pegó fue Houston, aunque no fue fuerte pues solo tomó ventaja de un gol de campo de Nick Novak. Sin embargo, lo que destaca aquí es que los Raiders parecían locales y la afición presionó muchísimo a Brock Osweiler.
Sin embargo, llegó Derek Carr que está jugando a un nivel espectacular. Seis completos de seis intentos para poner el primer touchdown de la noche con el novato Jalen Richard.
Pero los Texans no se quedaron con ganas de contestar y apareció otro novato. Braxton Miller recibió el pase de Osweiler para poner seis puntos en el marcador y con el punto extra, empatar las cosas.
En la segunda mitad el juego se puso aún mejor. Dos touchdowns de los equipos llegaron rapidito para darle más emoción a los aficionados que se lanzaron al Azteca. Primero, Lamar Miller con su tercer touchdown por tierra de la temporada y después, un bombazo de Carr a Jamize Olawale se emparejó de nuevo el juego.
Todo parecía muy muy complicado. Como dicen en la tele ‘no había nada para nadie’, pero apareció la genialidad de Amari Cooper, que tomó un pase corto de Derek Carr y lo convirtió en 35 yardas y el touchdown que les daría el triunfo.
Además, es una victoria importantísima porque ya le sacaron un juego de ventaja a los Chiefs que perdieron contra los Buccanners. Y lo mejor, la gente que se gastó una buena lana en los boletos salieron contentos y satisfechos con el regreso de la NFL a México.
***Fotos Mexsport y Getty Images
