Lo que necesitas saber:
Leo Beenhakker es recordado por su paso por América y Chivas, pero también dirigió a equipos como el Real Madrid y distintas selecciones nacionales
Leo Beenhakker, legendario entrenador que pasó por equipos como el América, Chivas, Real Madrid o Ájax, murió a los 82 años de edad. Arrastraba ya varios problemas de salud, y hoy se confirmó su fallecimiento.
Beenhakker tuvo una breve carrera como futbolista, pero fue en los banquillos donde alcanzó la cima con grandes equipos en distintos países. Lo dicho, dirigió en México a América y Chivas, en España al Real Madrid, en Países Bajos a Ájax y Feyenoord… puros grandes de cada liga.

Leo Beenhakker y una vida dedicada al futbol
Beenhakker nació el 2 de agosto de 1942, en Róterdam, Países Bajos. Jugaba en equipos de la ciudad mientras trabajaba para ayudar a su familia tras la muerte de su padre, llegando a jugar en segunda división.
Una lesión a los 19 años impidió que continuara con el sueño de ser futbolista, pero no se separó del futbol, pues muy joven comenzó a formarse para ser el exitoso entrenador que hoy despide el deporte entero.
Para 1967, con 25 años de edad, se convirtió en asistente de su primer equipo en Países Bajos, el Go Ahead Eagles. Un año después debutó como entrenador en el Veendam, dirigiendo un total de 140 partidos hasta 1972.
Pasó por Cambuur, Feyenoord y Ájax antes de emigrar a España con el Zaragoza, dirigir unos cuantos partidos a la Selección de Holanda (entonces sí se le llamaba así) y llegar al Real Madrid en 1986. Con el conjunto merengue dirigió cuatro temporadas, 169 partidos y ganó tres ligas consecutivas, una Copa del Rey y dos Supercopas de España.
Leo Beenhakker y el América que enamoró al futbol mexicano
El entrenador neerlandés venía de su segunda etapa en el Madrid, y de dirigir a la Selección de Arabia Saudita, cuando llegó al futbol mexicano. América dio lo que fue todo un bombazo por allá de 1994 con su llegada, y armó un equipo que enamoró por su juego ofensivo con jugadores como François Omam-Biyik, Cuauhtémoc Blanco, Zague o Kalusha.
El destino, y los pecados del futbol mexicano, provocaron que aquel América de las “Águilas Africanas” no se pudiera coronar en la temporada 94-95. Problemas extracancha con la directiva, por presiones de meter a Luis García forzosamente y sentar a Joaquín del Olmo, llevaron a su polémico despido en la recta final del campeonato. América quedó fuera en semifinales, y aquel equipazo de Leo Beenhakker quedó solo en el recuerdo, sin título alguno.
Leo Beenhakker, del América a Chivas y su regreso con las Águilas
Ese mismo año, Leo Beenhakker cambió radicalmente de piel, pues llegó a Chivas. También fue un paso breve, pues se fue en 1996 sin poder entrar en puestos de liguilla y eliminados por Atlas en la Copa.
Volvió al futbol mexicano en el 2003, de nuevo con el América. Su regreso llenó de ilusión a la afición azulcrema, pero la historia fue distinta. Sus Águilas no pudieron calificar a liguilla en el Apertura 2003 y los eliminaron en cuartos de final en el Clausura 2004.
Pero en esa segunda etapa con América hizo algo que marcó para siempre alfutbol mexicano, pues debutó a un tal Guilermo Ochoca en frebrero del 2004. El propio Memo Ochoa le mandó un mensaje emotivo ahora que se nos fue.
Cabe recordar que, además de dirigir a Países Bajos, Polonia o Arabia Saudita, Beenhakker tuvo su última hazaña con la modesta selección de Trinidad y Tobago, a la que llevó al Mundial de Alemania 2006, logrando sacarle un empate 0-0 a Suecia en fase de grupos con Ljungberg, Larsson e Ibrahimovic en la cancha.