El mercado de verano tendrá como protagonista al Real Madrid después de media temporada en la que ha coleccionado más críticas que triunfos. El proyecto con Julen Lopetegui duró menos que las Chivas en el Mundial de Clubes y aunque Santiago Solari hace lo que puede, el equipo no ha levantado lo suficiente.
Cuando Lopetegui fue despedido, el Madrid ocupaba el noveno sitio de la tabla general y lo más que ha podido hacer Solari es colocar el conjunto blanco en el cuarto sitio, de ahí no ha pasado; actualmente es quinto y si el torneo terminara ahora, no habría Champions para los merengues.
Ante esta situación, una de las piezas que más urge para la afición blanca para la siguiente campaña es el fichaje de un estratega de élite y José Mourinho es el principal candidato después de ser despedido del Manchester United y el portugués ya se dejó querer.
Mourinho rechazó ofertas del futbol de Portugal, específicamente del Benfica, lo cual hace latir los corazones merengues: “No tengo ninguna intención de trabajar en Portugal. Hoy no soy una opción para Benfica“. El portugués se dijo honrado por estar en la lista del Madrid, equipo con el que dejó buenas sensaciones en plena época dorada del Barcelona.
“Si cualquier profesional, técnico o jugador, es buscado por un antiguo club, significa que hicimos algo positivo. Cuando cualquier profesional vuelve a un club es un honor tremendo. No están fichando a alguien que no conocen, están buscando a alguien que ya conocen, que ya ha estado ahí”, dijo el lusitano.
No sería el único regreso
Durante su estancia en el Madrid, Mourinho contó como auxiliar técnico con Aitor Karanka, quien era el que salía a las conferencias de prensa cuando el portugués era suspendido o simplemente no quería soportar a los periodistas.
El español dirigió por un año al Nottimgham Forest, equipo de la Championship de Inglaterra que dio a conocer la salida del estratega al rescindir su contrato. Dejó al equipo a cuatro puntos de la zona de promoción al ascenso, buen ambiente en el vestidor, según Mundo Deportivo, y buena relación con los jugadores, sin embargo, la ruptura fue con la directiva.
De esta manera, el dúo de aquel Madrid de Mourinho, se encuentra libre para revivir a un equipo que se cae a pedazos.