El futbol y el deporte en general mueven sentimientos que en ocasiones son hasta inexplicables. Hemos visto ejemplos a lo largo de la historia que una buena motivación puede hacer grandes cosas, tan sólo hay que voltear a la Premier League y el Leicester City.
En Sevilla, España hay un equipo juvenil llamado San Roque Balompié y su entrenador, Antonio Fernández Fernández, nos regaló un discurso que podría motivar a cualquiera. El equipo se jugaba el descenso ante el Osuna Bote, el director técnico tenía apenas cuatro partidos dirigidos y el resultado fue el esperado, ganaron 6-0.
Seguro las palabras de Antonio tuvieron mucho que ver en ese triunfo.