El futbol ha perdido a uno de los hombres más importantes de su historia contemporánea, Mino Raiola. No era un hombre de cancha; su terreno de juego estaba en los escritorios y era uno de los representantes de jugadores más importantes del mundo, al lado de Jorge Mendes.
Sólo un par de días después de que el propio Mino Raiola desmintiera a través de su cuenta de Twitter su propio fallecimiento, tras las múltiples condolencias expresadas en redes sociales (entre ellos Real Madrid), la familia del agente confirmó su fallecimiento: “Con infinito dolor anunciamos la muerte del más cariñoso y extraordinario agente”.
Raiola era representante de jugadores top, entre ellos Zatan Ibrahimovic, Erling Haaland y el mexicano Hirving ‘Chucky’ Lozano, sin olvidar a Paul Pogba y Mario Balotelli.
¿Quién fue Mino Raiola?
Raiola nació el 4 de noviembre de 1967, en Nocera Inferiore, Italia. Antes de convertirse en el uno de los agentes más importantes del mundo, Mino Raiola fue pizzero y así fue identificado por muchos hasta el día de su fallecimiento. Estudio derecho e idiomas (hablaba ocho idiomas), pero también era un apasionado del futbol.
Desde muy pequeño se mudó a Países Bajos, donde jugó para el Haarlem en categorías juveniles, pero su verdadero talento no estaba en la cancha. A través del Haarlem hizo conexión con una agencia de representación, Intermezzo, aunque tiempo después se independizó y comenzó a trabajar solo.
El hecho de haber crecido en Países Bajos, sin perder la conexión con Italia, lo convirtió en un puente para llevar jugadores de la Eredivisise hacia la Serie A, el más importante de ellos fue el fichaje de Denis Bergkamp, del Ajax, al Inter de Milán, pero llegó definitivamente a las Grandes Ligas con el checo Pavel Nedved.
El checo jugaba parea el Star Praga y dio el salto a la Serie A con la Lazio y en 2001, tras cinco temporadas en Roma, fue fichado por la Juventus y Raiola nunca más bajó del más alto nivel, pues Nedved ganó el Balón de Oro en 2003.
Un tipo incómodo para los entrenadores
La fórmula de su éxito era buscar lo mejor para sus jugadores, tanto en la cancha como fuera de ella, pero principalmente en lo económico, en lo cual obviamente él también se beneficiaba.
Radicaba en Mónaco, por lo que era común verlo en el Gran Premio de Fórmula 1, en el cual solía hacer grandes negociaciones año con año, aprovechando que el glamour y a la vez la aproximación del cierre de temporada.
A veces era tanta la injerencia de Raiola con sus representados que se volvía un dolor de cabeza para estrategas como Alex Ferguson, quien perdió a Pogba en 2012. El jugador francés se marchó libre a la Juventus, que le ofreció al jugador un millón de dólares por firmar contrato.
“Mino Raiola había logrado congraciarse con la familia de Pogba y el jugador firmó por la Juventus. Nosotros queríamos renovar a Paul, pero Raiola apareció y todo fue mal desde la primera reunión. Nosotros le pusimos sobre la mesa un buen contrato, pero tenía un mal agente. Un cubo de mierda”.
Ya sin Ferguson en el United, Pogba regresó a la Premier League por 105 millones de euros en 2016; el negocio perfecto.
El mundo del futbol lamenta su partida
Uno de los jugadores que lamentó el fallecimiento de Raiola fue el mexicano Lozano, quien dedicó un mensaje den sus redes sociales después del partido del Napoli, en el que marcó uno de los seis goles al Sassuolo.
“Tuve la fortuna de conocerte y de aprender de ti. Uno de mis grandes maestros en las lides del futbol. Hoy estás en un lugar mejor porque estoy convencido de que tu legado trasciende la vida, sin lugar a dudas. Convivir contigo fue una de las mejores cosas que me han pasado. Nunca podré olvidar nuestras charlas y todos los momentos juntos.
“El dolor es pasajero, algún día lo superaré y desaparecerá, en cambio, tu recuerdo vivirá por siempre en mi. Nunca dejaré de extrañarte. Te agradezco todo. Honraré tu memoria en cada paso que de dentro y fuera de la cancha. Descansa en paz Mino Raiola, duerme y sueña mientras llego, que aún tenemos pendiente un segundo tiempo por jugar“, compartió.