Steve Kerr es el coach de la franquicia más exitosa en la última década en la NBA. Con los Golden State Warriors ha ganado cinco títulos y ha reinado seis veces en el Conferencia del Oeste. En 2016, el equipo de Kerr impuso un nuevo récord al finalizar la temporada regular con una marca de 73 victorias y nueve derrotas, números con lo que dejó en el pasado el récord de 72-10 de los Chicago Bulls de 1996, equipo en el que fue compañero de Michael Jordan.
Precisamente la relación entre Kerr y Jordan ha dado de qué hablar en ‘The Last Dance’, que revela uno de los momentos más tensos en la dinastía de los Bulls, pues Jordan soltó un puñetazo a Kerr, quien terminó con el ojo morado.
El momento se dio en la pretemporada, cuando Jordan regresó a los Bulls después de su primer retiro, en el que incursionó en las ligas menores de beisbol. ‘The Last Dance’ revela una especie de fricción de Jordan con algunos compañeros, entre ellos Kerr, quien durante un entrenamiento marcó a Michael y le hizo la vida tan complicada, que terminó por soltarle el puñetazo y se marchó a la ducha sin mencionar palabra alguna.
La acción bien pudo provocar una fractura interna, sin embargo, tanto Jordan como Kerr concuerdan que dicho episodio ayudó a fortalecer y unir al equipo, pues MJ liberó el cúmulo de furia y frustración, por lo que cambió su actitud con el equipo.
“Es parte de la competencia a alto nivel, pero es muy, muy extraño que todos conozcan la historia y hablen de ella”, dijo Kerr a ESPN, tras liberarse el episodio.
Jordan no había convivido tanto con Kerr, por lo que a pesar de ser compañeros, no tenía el número telefónico del base, por ello lo fue a pedir en el equipo y llamó más tarde. Kerr no respondió a la llamada, pero la disculpa quedó grabada en la contestadora.
“Me llamó más tarde ese día y se disculpó. De una forma extraña, fue casi un paso necesario en nuestra relación, de una forma rara y desde entonces, creo que me entendió mejor y viceversa y nos llevamos mejor y competimos juntos y confió más en mí”, señaló Kerr.
Kerr y Jordan ganaron el segundo triplete de la franquicia de 1996 a 1998, pero no volvieron a tocar el tema del puñetazo.
“Nunca hemos hablado de eso. Para ser honesto ni siquiera lo pienso, pero me preguntan mucho sobre eso porque es una situación única”, explicó.