Después de un fin de semana lleno de béisbol en el estadio B’Air de Mexicali, Baja California, finalizaron los encuentros clasificatorios para el Clásico Mundial de Béisbol que se disputará en marzo del siguiente año y México dominó a placer.
Esta eliminatoria la tienen que jugar las selecciones que no clasificaron a la edición pasada del Clásico Mundial y las selecciones que a pesar de haber llegado al máximo torneo de selecciones de béisbol, quedaron en el último lugar de su grupo en la pasada edición del torneo.
En este caso, México tuvo que jugar la eliminatoria ya que, a pesar de haber ganado el juego ante Estados Unidos el mundial pasado, perdió sus respectivos duelos ante Canadá e Italia, partidos que eran “de trámite”, pero que los dejaron en el último lugar del grupo, obligándolos a jugar la clasificatoria.
En el primer encuentro, a México le bastó con un hit de Jesse Castillo que partió el diamante en dos y un fly productor de sacrificio cortesía de Agustín Murillo, para anotar dos carreras con las que ganó el enfrentamiento del primer día de actividades ante República Checa. A pesar de ganar el juego, tal parece que por ciertos momentos al combinado azteca se le complicó el encuentro ya que los checos acortaron la distancia en la octava entrada con un batazo que se fue para la calle cortesía de Malej Hejma, jardinero central del conjunto europeo.
Por su parte, Nicaragua le ganó en extra innings un emocionante juego al conjunto de Alemania por pizarra de 5 a 4. De esta manera, las novenas ganadoras (Nicaragua y México) se enfrentarían el día viernes, mientras que las escuadras perdedoras (Alemania y República Checa) se enfrentarían por una oportunidad más dentro de la clasificación.
En el primer encuentro del día viernes, República Checa le llevaba buena diferencia a la escuadra teutona con la pizarra 8 a 2, pero en la octava entrada, explotaron los maderos de la ofensiva checa consiguiendo siete carreras y de esta manera, acabar el encuentro por nocaut.
Lo mismo ocurrió en el juego de México contra Nicaragua. La novena azteca sumó dos carreras en la primera entrada, dos más en la segunda, explotaron los maderos en la cuarta entrada anotando cinco carreras, y cerraron el telón anotando dos carreras más en la sexta entrada para poner la pizarra 11 – 0, así que al terminar la mitad de la séptima entrada, México ganó el encuentro por nocaut.
La victoria del segundo juego puso a México directamente en la final de la clasificatoria, pero República Checa al eliminar a Alemania tenía un nuevo chance de llegar a la final, pero para llegar a eso, tenían que pasarle por encima a la novena nicaragüense el sábado por la noche. La pizarra de ese encuentro al terminar nueve entradas completas, marcaba cuatro carreras para checos y nicaragüenses, por lo que hubo entradas extra. Al llegar a la onceava, Nicaragua anotó tres carreras en la parte alta, mientras que los checos intentaron alcanzarlos, pero no les alcanzó ya que sólo consiguieron anotar dos carreras dejando la del empate en la tercera.
Con este resultado, Nicaragua se volvería a enfrentar a México pero ahora por el boleto al Clásico Mundial. La ofensiva mexicana explotó en grande en la segunda entrada anotando seis carreras, cinco más en la quinta entrada y anotó una última en la sexta entrada poniendo la pizarra 12 – 0. Aún así, los nicaragüenses no bajaron los brazos y anotaron la de la quiniela en la séptima entrada. El encuentro acabó por nocaut con la pizarra 12 – 1 a favor de México, y de esta manera, consiguió su boleto al Clásico Mundial.
Irving Rebollar / Fotos Twitter
