En el partido entre México y Nueva Zelanda las autoridades no se anduvieron con rodeos. Se reportaron que había muchísimas personas revisando antes y durante el juego para que no se diera el infame grito.
La afición mexicana, en su gran mayoría, cumplió la regla. Al fin se dejó de gritar “ehh puto” y con esto se evitaron mayores consecuencias. Claro, siempre están los que siguen de necios y pues les cayó todo el peso de la FIFA.
En redes sociales informaron que dos personas dejaron el estadio, o más bien los sacaron. De ahí, las cosas se les pusieron muy mal.
Fueron expulsados dos aficionados por considerar que sus gritos eran ofensivos. Impresionante la seguridad y efectividad del operativo. pic.twitter.com/R9sZR8WhgL
— Non Violence (@NVPMexico) 22 de junio de 2017
El último reporte indica que las autoridades rusas no se andan con payasadas. Las consecuencias son gravísimas y más si te fijas en lo que les quitaron.
Recibieron una multa de 15 mil rublos, que son más o menos cinco mil pesos. Obvio ya no regresaron al estadio pero les quitaron su Fan ID. Esto quiere decir que ya no pueden entrar a ningún partido de esta Confederaciones. Y finalmente, ya están marcados, así que es muy probable que tampoco puedan entrar a un juego en el Mundial del año que viene.
En pocas palabras, por andar rompiendo las reglas se les echó a perder todo el viaje…
Así que ya saben, esto de evitar y eliminar el grito va en serio. Rusia y el futbol no aceptarán más esta expresión.