En la historia del futbol ha habido jugadores llenos de magia, uno de ellos es Mesut Özil. Un jugador alemán que derrochó talento en Alemania, España, Inglaterra y Turquía.
Debutó con el Schalke 04 y sus momentos de brillantes con aquel equipo, hicieron que diera el salto a Werder Bremen y posteriormente, en su mejor momento fue al Real Madrid.
José Mourinho lo arropó en un Real Madrid plagado de talento y lo hizo uno de los mejores de aquella plantilla histórica, que combatió directamente con el Barcelona de Pep Guardiola.
Desafortunadamente, su paso con el Real Madrid terminó y Mesut Özil fue al Arsenal para convertirse en uno de los mejores jugadores de la Premier League, pero su etapa con los Gunners acabó con polémica.
Fue a Turquía con el Fenerbache, estuvo unos años y con el Basaksehir se retiró oficialmente. Además de todo esto, con la Selección de Alemania, consiguió la Copa del Mundo en Brasil 2014, o sea, todo un crack dentro del campo.
Los increíbles pases de Mesut Özil en su carrera como futbolista
El futbolista alemán es uno de los mejores técnicamente hablando en la historia del futbol, su calidad está comprada, anotó goles impresionantes, pero si por algo será recordado Mesut Özil, es por sus pases que sólo él podía inventar.
Mesut Özil contaba con una calidad tremenda y una visión de campo digna de admirarse. Podía ver espacios donde nadie más imaginaba y fue uno de los maestros de las asistencias en el mundo.
Contra el Burnley se inventó un pase cuando se ubicaba por el área grande, cerca de la banda derecha. Vio el movimiento de uno de sus laterales en la otra banda y metió un pase increíble que cruzó el área y su compañero ya estaba ahí para ceder a Aubameyang, que sólo disparó a gol.
Olivier Giroud gozó a placer la magia de Mesut Özil, porque si alguien se benefició de sus impresionantes pases, fue el francés. Recordamos uno donde Mertesacker despeja el balón, Özil salta como karateka para conectar el balón y dejar a Giroud solito frente al arquero… ¡Simplemente magia!
No sólo con el Arsenal dejó su huella mágica, primero lo había hecho con el Real Madrid y hasta a Adebayor asistía. Una de las anotaciones del africano, fue gracias a un pase al espacio, de tres dedos y para dejarle el balón en el punto penal… El verdadero ‘Mago de Oz’.