El mercado de fichajes terminó y el Barcelona nunca pudo hacer oficial la contratación de Memphis Depay. El delantero, que se quedará en el Olympique Lyon, era una petición explícita de Ronald Koeman pero no se pudo concretar.

Tras la salida de Luis Suárez, el Barcelona emprendió la búsqueda de un nuevo delantero y Memphis Depay era la opción número uno. El jugador del Lyon ya había coincidido con Ronald Koeman y el entrenador pensaba que podría generar una buena competencia con Antoine Griezmann y Martin Braithwaite.

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Desde entonces comenzó la búsqueda: ¿Cómo llevar a Memphis Depay al Barcelona? Primero el Olympique Lyon se negó, después fijó un precio y aceptó negociar. Finalmente dio una fecha límite y en el último día del mercado de fichajes, el anuncio nunca llegó.

El próximo intento del Barcelona por fichar a Memphis Depay será para el mercado invernal. El contrato del holandés con el Olympique Lyon termina en junio del 2021. Es por eso que los culés podrían toparse con una negociación más viable y liviana en ese entonces.

La salida de Luis Suárez

Es un jugador excelente. Puede jugar como delantero, pero también hace un gran trabajo como extremo izquierdo. Tiene fuerza, aguanta bien la pelota, gana sus duelos y tiene un rendimiento alto“, declaró Ronald Koeman cuando reveló el interés que tenía el Barcelona por Depay.

El principal problema del Barcelona para lograr el fichaje del holandés, era la liquidez. La pandemia del coronavirus dejó en “crisis” a los culés y con pérdidas millonarias. Es por eso que darle salida a Luis Suárez, una de las fichas más altas del equipo, se convirtió en prioridad.

Aún hay esperanza: Koeman admitió que espera los fichajes de Eric García y Memphis Depay

Primero salió Ivan Rakitic, por quien no ingresaron nada, ya que rescindieron el contrato y el croata llegó gratis al Sevilla. Lo mismo hicieron con Arturo Vidal, quien se terminó uniendo a las filas del Inter de Milan.

Dos fichajes y cero euros para el Barcelona, que había logrado negociar dinero en variables, pero nada más. La salida de Luis Suárez se complicó porque el uruguayo se negaba a renunciar por completo a su último año de salario y eso retrasó las negociaciones del club por Depay.

El precio por Depay

El otro problema del Barcelona, es que el Olympique Lyon le pedía no menos de 30 millones de euros para dejar salir a Depay. En otros momentos, esa cantidad hubiera sido más que accesible pero tras la pandemia del coronavirus, Bartomeu y compañía sabían que necesitaban vender.

Fue a mediados de septiembre del 2020 cuando desde Holanda reportaban un acuerdo entre Barcelona y Lyon por los ya establecidos 30 millones de euros. Pagarían 25 en el momento y cinco más en variables, a los que se podrían sumar dos más en variables.

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Sin embargo, apenas días después el presidente del Olympique Lyon, Jean Michel Aulas reveló que el Barcelona no tenía dinero y por eso se había complicado la negociación por el holandés.

El presidente del Barcelona me dijo el domingo que el Barça está sufriendo mucho por la crisis del covid y no tenía posibilidad de hacer una oferta“, escribió en su cuenta de Twitter.

A esa declaración se sumó la de Ronald Koeman. El entrenador del Barcelona descartó que existiera algún acuerdo por Depay. Incluso el técnico holandés aseguró que primero debían “deshacerse” de los jugadores con los que no contaban, buscando obtener esa liquidez económica.

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Estamos trabajando por la nueva temporada y creo, ahora mismo, que lo haremos con los mismos jugadores con los que estamos trabajando ahora“, declaró en conferencia de prensa.

Riqui Puig y Ousmane Dembélé fueron clave

La pésima gestión de Bartomeu y compañía en el mercado de fichajes, es un tema que trataremos después. Riqui Puig fue notificado por parte de Ronald Koeman, que no contaba con él para la temporada.

Sin embargo el canterano decidió quedarse a demostrar lo que valía y se negó a escuchar ofertas de otros equipos. La afición culé respaldó la decisión del juvenil, a quien le ven mucho futuro y calidad por los destellos que ha dado en el terreno de juego.

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A diferencia de Ousmane Dembélé, quien se ha convertido en un dolor de cabeza no sólo para la afición del Barcelona, sino también para la directiva. No se duda de la calidad del francés pero las lesiones le han impedido destacar en el Barcelona, recordando todo lo que pagó el club para ficharlo, procedente del Borussia Dortmund.

A Dembélé lo buscaba el Manchester United. Los ‘red devils’ querían un préstamo por el francés pero el jugador se negó. Eso sucedió en el último día del mercado de fichajes y así, el Barcelona vio completamente terminado su sueño de ir por Depay.

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El pésimo mercado de fichajes del Barcelona

Ronald Koeman dio la lista de aquellos que tenían que salir para la próxima temporada. Luis Suárez, Arturo Vidal, Nelson Semedo, Ivan Rakitic, Rafinha, entre otros.

Luis Suárez estaba valuado en 28 millones de euros. Ivan Rakitic en 20 millones de euros. Arturo Vidal en 11 millones de euros. Nelson Semedo en 40 millones de euros. Rafinha en 9.5 millones de euros. La suma de todos ellos sobrepasaba los 100 millones.

De todos ellos, sólo obtuvieron 31.5 millones de euros y la mayoría fue por la venta de Semedo al Wolves. Sin embargo invirtieron 31 en el fichaje de Trincao, procedente del Braga y 21 en el de Sergiño Dest, procedente del Ajax.

Ya ni hablar de la salida de Arthur. El mediocampista brasileño, valuado en 52 millones de euros, llegó en intercambio por Miralem Pjanic. Una operación que le dejó 12 millones únicamente al Barcelona. Nunca hubo dinero para fichar a Memphis Depay.

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