El Gran Premio de Italia ha comenzado con un gran susto en las prácticas libres, tras el accidente protagonizado por Marcus Ericsson a los 350 kilómetros por hora en circuito de Monza.
Sucedió en la segunda práctica libre del día, la cual recién iniciaba. El volante de la escudería Sauber tomó la recta del circuito y alcanzó los 350 kilómetros antes de llegar a la curva, la cual requería vuelta hacia el lado derecho, sin embargo, Ericsson perdió el control de su monoplaza.
De manera inexplicable, el piloto sueco giró hacia la izquierda y terminó por estrellarse con el muro de contención para después dar vueltas de campana, lo que dejó al auto hecho trizas.
Al momento del accidente se hizo el silencio en Monza, sin embargo, después de unos segundos el piloto se comunicó con su equipo por radio: “No sé qué pasó, estoy bien”, para después levantar las manos y confirmar que se encontraba ileso, lo que desató aplausos por parte del público.
El accidente provocó una bandera roja, por lo que los autos en la pista tuvieron que regresar a los pits mientras se recogían los restos del Sauber y permitía el paso de la grúa para trasladar lo que quedó del monoplaza con los mecánicos del equipo.
El accidente se da a menos de una semana del choque que dejó fuera a Fernando Alonso del Gran Premio de Bélgica en la primera vuelta, tras ser impactado por Niko Hulkenberg.
¿Por qué perdió el control?
Después de analizar las imágenes se determinó que Ericsson no pudo cerrar el DRS debido a un problema mecánico. El DRS es un sistema hidráulico que permite a los pilotos alcanzar con mayor facilidad las altas velocidades cambiando de posición el alerón trasero.
DRS OPEN!
The reason for Ericsson’s big shunt 👀#ItalianGP 🇮🇹 #F1 pic.twitter.com/w0GjPDf4xr
— Formula 1 (@F1) 31 de agosto de 2018
Los pilotos sólo pueden utilizar el DRS en determinadas partes de los circuitos, principalmente en las recatas largas, siempre y cuando tengan un segundo de distancia respecto a otro auto.