El juego contra los Baltimore Ravens no fue el mejor día para los New England Patriots, que no sólo sufrieron su segunda derrota de la temporada (26-37), sino que podrían perder un rato a su quarterback, Mac Jones, después de su último intento de lanzamiento.
El quarterback salió del emparrillado sumamente dolorido y sin poder apoyar la pierna izquierda, aunque el hecho de que el jugador haya salido hacia la banca con sus propios recursos dio una buena señal.
¿Qué pasó con Mac Jones?
Sin embargo, en redes sociales comenzaron a circular imágenes del quarterback, quien se dirigía hacia los vestidores apoyado por dos personas y un gesto de dolor que prende alarmas. Los primeros reportes, sin embargo, indican que Jones volverá a jugar en esta misma temporada, aunque lo más seguro es que se pierda al menos un par de partidos.
El jugador fue evaluado en el mismo estadio con estudios de Rayos X y las radiografías descartaron una fractura en el tobillo, y como consecuencia se todo apuntaba a un esguince en la parte alta del tobillo izquierdo. El jugador fue sometido el lunes a una resonancia magnética, la cual confirmó un esguince de tercer grado. Aún se estudia la opción de operar para reparar los ligamentos rotos, pero de entrada se habla de una baja de al menos cuatro semanas.
¿Quién lo va a sustituir?
Como la lesión se dio sobre el cierre del partido, no hubo necesidad de echar mano del quarterback suplente, sin embargo, en caso de que se termine de confirmar la baja de Jones llegará la oportunidad para el veterano de 36 años, Brian Hoyer o para Bailey Zappe, de 23.
La preferencia en los Pats para el juego de la cuarta semana, contra los Packers, recaería en la experiencia de Hoyer.