Hace una semana las entrañas del Luis ‘Pirata’ Fuente se llenaron de sangre y violencia. Los Tigres de la UANL le pusieron un baile a los Tiburones Rojos de Veracruz y en la tribuna se desató un zafarrancho. Dentro del conflicto se pudo ver una hombre con un picahielos (cómo lo ingresó al estadio, quién sabe) y hasta un aficionado fue captado consumiendo cocaína dentro del estadio. Pese a ello algunos decidieron culpar a André-Pierre Gignac de provocar los hechos violentos por supuestamente ir a festejar su gol en la cara de los aficionados jarochos.
La versiones fueron muchas y el escándalo explotó. Gignac sugirió que los Tiburones “mejor se fueran a segunda”, el ‘Tuca’ Ferretti gritó, insultó y zarandeó a un policía y claro que no fue castigado por ello y Jesús Dueñas terminó herido del brazo por un botellazo. Al tiempo que eso sucedía las tribunas del ‘Pirata’ sólo veían a algunos huir despavoridos y a otros agarrarse a trancazos. Entre las diversas versiones de los hechos existe una que de ser cierta sería muy grave.
Se ha dicho que la porra de los Tigres comenzó a agredir a aficionados comunes del Veracruz (no de la porra),simplemente por hacer la maldad. Al ver eso entonces sí la porra del Tiburón saltó a ‘defender’ a su gente y comenzó campal. La opinión generalizada fue que el problema era de Tigres y que los Libres y Lokos eran quiénes habían provocado las cosas.
El presidente de Santos Laguna, Alejandro Irarragorri culpó a los ‘Libres y Lokos’ del incidente en Veracruz y recordó cuando el ‘Tuca’ Ferretti le aventó agua a unos aficionados en Torreón. Juan Francisco Palencia, director técnico de los Pumas de la UNAM también dijo que la barra de Tigres fue la que comenzó el problema. Quizá la opinión general no sería tan severa si fueran cualquier otra barra, pero la porra felina tiene todo un historial.
La persecución mediática en contra de la porra de los regiomontanos ha sido tal que Samuel Reyes, uno de los líderes de la barra ha tenido que salir a defender a los suyos diciendo que “ellos no tienen nada que esconder” y que cuando ocurrió el incidente del conflicto en Torreón el “habló con su gente y les dijo, si les volvían a hacer problema en una tribuna más vale que los maten a golpes pero no metan las manos”.Pues su gente no le hizo mucho caso.
Las barras , son un concepto muy polémico que más allá de un supuesto ‘color’ que ofrecen al futbol hasta ahora no han aportado más que violencia y problemas. En general son grupos numerosos que cuentan con apoyo económico de las directivas de algunos clubes. Son organizaciones que tienen un líder que aunque se considera a sí mismo el cabecilla del grupo no responderá (legalmente) por algo que haya hecho su gente. Los ‘Libres y Lokos’ tienen una página oficial y comercializan productos (con qué dinero los maquilan no dice en su sitio) y solían tener amigos, antes de su infame pelea con la Rebel. Las barras son una estructura tan similar a una mafia que como alguna vez le dijo un miembro de la Rebel a Vice, ‘hasta intercambiaban mujeres’.
Es bien conocida la amistad que teníamos, la gente de Pumas, con los Libres y Lokos de los Tigres. Ellos venían y comían con nosotros, bailábamos, cantábamos, nos empedábamos juntos y hasta intercambiábamos mujeres
En aquella ocasión las porras de Tigres y Pumas se pelearon en Nuevo León debido a una supuesta confusión de la Rebel con la Adicción (porra del Monterrey), la pelea la ganaron los Libres y Lokos pero cuando pagaron la visita, la porra de los Tigres fue masacrada en Ciudad Universitaria.
Sin duda el conflicto más famoso de la porra de los Tigres fue aquella batalla que sostuvieron en CU con la Rebel, lamentablemente ese no fue el único. Muy recordadas son las broncas en un partido contra el Santos Laguna y el conflicto entre los Libres y Lokos y la Barra 51 del Atlas y los múltiples problemas de los felinos con La Adicción. Si uno escribe en Google ‘Libres y Lokos peleas‘ arrojará más de 75 mil resultados y si se busca en YouTube se tendrá acceso a más de 11 mil videos. Eso no quiere decir que todo el material trate sobre la barra felina, pero sirve para darse una idea.
Según su sitio oficial, los ‘Libres y Lokos’ tienen 18 años de vida en los cuales se han destacado mucho más por sus escándalos y peleas que por una gran aportación a la cultura futbolística. Es curiosos que siempre que hay problemas con esta barra ocurre en los estadios visitantes, seguro no tiene nada que ver que temen que les veten el ‘Volcán’, pero lo que aquí hay que preguntarnos es si ¿realmente vale la pena tener una organización de casi dos décadas de vida cuyos errores han sido muchos y muy violentos y cuyo principal logró según su página web es “haber lanzado la mayor cantidad de rollitos de papel en un partido de la Liga MX”?
** Fotos: Especial
