Aunque ya hay una fecha para que el futbol europeo se restablezca a principios o finales del mayo, de acuerdo con Javier Tebas, presidente de la liga española, la maneada sigue en el aire para los aficionados del Liverpool, que por una especie de maldición no ha visto a su equipo campeón de la Premier League en casi 30 años.
La última vez que los Reds se coronaron fue en la temporada 1989-90, antes de que fuera instaurada la Premier League como lo conocemos actualmente. En aquella temporada, el equipo de Anfield terminó el torneo con 79 puntos, nueve más que el sublíder Aston Villa y era el equipo con más títulos en Inglaterra con un total de 18.
En dicha temporada, perdió cinco partidos, empató 10 y los 23 restantes fueron victorias, además marcó 78 goles. Manchester City era un equipo del montón (se tenía que decir y se dijo), de modo que terminó en el sitio 14 con 48 puntos, 31 puntos menos que los Reds.
Tal vez la temporada en la que Liverpool ha estado más cerca del título fue en la 2018-19, pues hizo 97 puntos, marcó 89 goles y se coronó en la Champions League. Era la campaña casi perfecta, pues en la Premier sólo perdió un partido, pero el error fue empatar siete veces, lo que dio oportunidad al Manchester City para coronarse con 98 unidades. Si los Reds hubieran convertido uno (sólo uno) de sus empates en triunfo, la historia sería distinta.
Liverpool ya no es el equipo más ganador de Inglaterra, ese honor recae en el Manchester United y sus 20 coronas, mientras que el Manchester City consiguió cuatro títulos en los 30 años de sequía Red, uno de ellos en la 2013-4, cuando Liverpool era líder en la jornada 36, pero se desplomó tras el resbalón de Steven Gerrard en el partido contra Chelsea.
La temporada 2019-20 parecía ser la buena. Todo parecía ser cuestión de tiempo para que llegara el anhelado título al sumar 82 puntos y un buen colchón de 25 unidades sobre el sublíder Manchester City, que tiene 57 y un partido pendiente.
Con nueve jornadas por disputarse, Liverpool sólo necesitaría un par de triunfos para coronarse sin depender de lo que haga el City, hasta que apareció el coronavirus, el cual obligó a detener la actividad el 13 de marzo, el mes marcado para el título del Liverpool, que ahora reza para que la Premier League no sea cancelada y la maldición no se expanda.