El Gran Premio de Gran Bretaña fue una victoria para el local, Lewis Hamilton. El piloto de Mercedes dominó de principio a fin el circuito de Silverstone para acercarse al primer lugar del campeonato.
Hamilton se quedó con la pole position en la clasificación. La posición de privilegio le dio una gran ventaja que jamás perdió. Su carrera nunca se vio en riesgo y sacó una ventaja de hasta 14 segundos al segundo lugar.
Lo más destacado fueron las últimas dos vueltas. Los dos Ferrari tuvieron problemas con sus neumáticos. Kimi Raikkonen y Sebastian Vettel perdieron posiciones por esto y el campeonato se cerró de manera impresionante.
El podio lo completó el compañero del inglés, Valtteri Bottas en el segundo puesto. Bottas se rifó como los grandes pues remontó ocho posiciones para llegar ahí. La tercera posición fue para el otro finlandés, Kimi.
No fue la mejor carrera de Sergio Checo Pérez. Desde la arrancada el mexicano perdió posiciones y de ahí no pudo recuperarse. De lo malo, lo bueno, pues al menos el piloto de Force India no salió de la zona de puntos y quedó en la novena posición.
Esta es la cuarta victoria de manera consecutiva para el ex de McLaren en este circuito. Además, es el quinto triunfo en toda su carrera, haciendo válida la condición de local.
Gracias a este resultado, el campeonato mundial está que arde. La Fórmula 1 tenía mucho tiempo sin ver algo así. Lewis Hamilton llegó a 176 puntos y sigue en el segundo lugar, pero Vettel, por su problema, apenas sumó seis puntos y queda con 177 en la punta, ¡una unidad de diferencia!
Así, esperamos el Gran Premio de Hungría, el 30 de julio. En el Hungaroring veremos si Hamilton le quita la cima al alemán o Sebastian logra defender su posición.