Los Juegos Olímpicos de Tokio se mantienen en pie pese a la situación sanitaria en Japón. 10 prefecturas se encuentran en estado de emergencia y aunque se había anunciado el fin de éste para el último día de mayo, ocho de estas prefecturas alargarán el estado de emergencia, entre ellas Tokio.
A menos de dos meses de la ceremonia de inauguración, la situación sanitaria en el país sede se mantiene delicada, en gran parte a que el proceso de vacunación ha sido lento. A menos de 60 días del inicio de los Juegos Olímpicos, sólo el seis por ciento de la población está vacunada.
Los Juegos Olímpicos siguen en pie
Ante esta situación, japoneses se han manifestado en contra de la celebración de los Juegos Olímpicos. Algunos patrocinadores han pedido también el aplazamiento o cancelación de la justa deportiva y la comunidad médica ha publicado los riesgos en caso de corregir fallas graves en el protocolo.
Sin embargo, el primer ministro de Japón, Yoshihide Suga, manifestó que se trabaja para garantizar la salud tanto de los ciudadanos japoneses, como de los atletas, situación por la que se tomó la decisión de extender el estado de emergencia hasta el 20 de junio, de acuerdo con CNN.
“Sé que hay muchas opiniones sobre los Juegos. Nos las tomamos muy en serio e intentamos tomar medidas”, mencionó y además se comprometió a acelerar el ritmo para la aplicación de las vacunas.
¿Por qué ha sido lenta la vacunación en Japón?
A diferencia de otros países, en Japón los médicos son los únicos autorizados para la aplicación del fármaco. De esta manera, en el país asiático se dio prioridad al personal médico para ser el primer grupo en recibir las vacunas.
Esta situación se ha combinado con el hecho de que no hay las suficientes vacunas, así como escasez en el personal médico calificado para la aplicación de la vacuna, pues éste debe atender pacientes.
Tanto Tokio como Osaka, los índices de contagio han mostrado una línea descendente. En la última semana, el promedio de contagios en Tokio fue de poco más de 500 casos nuevos por día y aunque estas son buenas noticias, se considera que el riesgo de una nueva ola de contagios es alto, por lo que el estado de emergencia permanecerá al menos hasta cuando falte un mes para la actividad de los Juegos Olímpicos.
