Tuvo que pasar un año para que Juárez volviera a jugar con afición y todo salió mal, ya que el equipo fronterizo fue goleado gacho por Rayados de Monterrey que llenó la canasta 6-1.
Si los seguidores de Bravos no podía ingresar al estadio por las normas sanitarias para evitar contagios de coronavirus, ahora se lo pensarán dos veces y no tanto por el temor al contagio, sino por el temor al ridículo.
Juárez se unió a Mazatlán, Necaxa y Chivas como los únicos equipos que han abierto las puertas de sus estadios en el último año, luego de recibir el permiso de las autoridades de Chihuahua, sin embargo, la oncena de Luis Fernando Tena lejos estuvo de encontrar motivación en las gradas.
El equipo fronterizo llegó a este partido con la marca del ridículo hecho en Torreón, después del autogol que se comió Enrique Palos, quien ya es el arquero más goleado de la temporada después de los seis pepinos que le clavó Monterrey.
Los goles de Rayados
Seis mil almas en pena fueron testigos de la tragedia de Juárez, que en sólo dos partidos ha recibido nueve tantos. Vicent Janssen fue el encargado de abrir una cuenta sin fin a los 13 minutos, mientras que Ponchito González firmó el 2-0 al 18’.
Juárez descontó con el gol de Darío Lezcano a la media hora de juego, pero sólo prendió la mecha, ya que Rayados se desató bien y bonito contra el equipo local.
Rogelio Funes Mori marcó un doblete en el complemento y Janssen no se quedó atrás, mientras que José Alvarado cerró la velada de goles.