La temporada se ha terminado antes de tiempo para Josh Shaw, esquinero de los Arizona Cardinals, pues la NFL le cayó en la movida de las apuestas, por lo que lo suspendió lo que resta de la temporada.
El originario de Palmdale, California, ha hecho múltiples apuestas en la actual temporada y eso no tiene contenta a la NFL, pese a que en la investigación no hay indicios de corrupción, ya que no hay evidencia sobre el uso de información privilegiada o algún amaño en los partidos de su equipo.
Sin embargo, entre que son peras o son manzanas, la NFL ya actuó con una suspensión y sólo podrá pedir su reintegración a la liga a partir del 15 de febrero, una vez que se haya jugado el Super Bowl.
En un comunicado, el comisionado de la NFL, Roger Goodell, dejó claro que mientras un jugador esté en la NFL, ni de chiste puede estar dentro del mundo de las apuestas. “Si trabajas en la NFL, no puedes apostar en el futbol americano de la NFL”.
Indicó que la medida forma parte de la intención de mantener una buena imagen en la liga a nivel mundial. “El éxito continuo de la NFL depende directamente de que cada uno de nosotros haga todo lo necesario para salvaguardar la integridad del juego y las reputaciones de todos los que participan en la liga.
“En el centro de esta responsabilidad está el principio que apostar a partidos de la NFL, o cualquier elemento del juego, pone en riesgo la integridad del juego, daña la confianza del público en la NFL y está prohibido en todas las circunstancias”, indica en el mismo comunicado.
Esta es la primera suspensión en la NFL por apuestas en los últimos 35 años. En 1983, el quarterback de los Colts de Baltimore, Art Schlichter, fue cachado con las manos en la masa, pero pudo regresar la temporada siguiente.
