Cualquiera podría decir que entre más alto, más chance habría para jugar basquetbol y tener éxito en ese deporte. JaVale McGee juega como pivot con los Lakers de Los Ángeles y mide 2.13 metros, sin embargo, teme que los jugadores demasiado altos estén en peligro de extinción.
McGee recordó en una entrevista con ESPN que los jugadores de más de dos metros como él, ya no son requeridos para jugar como pivot, incluso el All Star de la NBA decidió unificar a los pivots con los aleros al momento de la votación.
“Parece que no nos quieren aquí. Están tratando de sacarnos de aquí y el mejor ejemplo es que quitaron nuestra posición del All Star”, dijo el jugador de los Lakers.
Los jugadores más altos suelen jugar defensivamente muy cerca del aro, sin embargo, la estrategia ha cambiado para apostar por jugadores más “bajitos” y más ágiles que impiden el paso de los ofensivos desde la periferia y los obligan a terminar las jugadas con tiros de tres puntos, en los que es menos probable que haya éxito. Este tipo sistema de juego es conocido como small-ball.
A la ofensiva también los más altotes tienen menos chance de lucir porque el juego se realiza con velocidad por los costados, no tanto por el interior y esto limita a los gigantes.
“Nosotros no podemos anotar 40 puntos como los bases o los aleros, así que tenemos que ajustar nuestro juego de la misma manera para no quedarnos atrás”, declaró el refuerzo de los Lakers.
McGee, quien en la temporada pasada jugó con el campeón Golden State, el equipo que ha puesto de moda el small-ball, teme que para esta temporada tenga de nueva cuenta un papel secundario tras la llegada de LeBron James, quien puede desempeñar ese papel.
