Sólo 10 minutos bastaron para que Cruz Azul tuviera en el suelo al Pachuca, dominados, retorciéndose del dolor, ante los lamentos de los cementeros que ya decidieron no volver nunca al Azul y la sorpresa de quienes prendieron la tele 10 minutos tarde para ver ganando 3-0 a La Máquina, que seguramente pensaron que era una repetición de hace unos años.
Pero no, es real, Cruz Azul goleó a los Tuzos 5-0, los hizo pomada e hizo llorar de alegría a su afición, que hacía la ola en la grada, vitoreando el momento, saboreándolo, cantando y apoyando como nunca.
Todo encajó perfectamente e hicieron goles todos los que se esperaba que los hicieran este torneo, empezando por Walter Montoya, seguido de Felipe Mora, Ángel Mena, Édgar Méndez y nuevamente Mena, para lograr este escándalo, esperemos no sea toda la cuota del Clausura 2018.
Cruz Azul no metía 3 goles en casa desde octubre de 2016, un buen rato. Qué bueno por sus nobles aficionados, porque después de tantos años de aguantar carrilla, resistir adversidades, descepciones, Sub Campeonatos, etc, ya merecían algo que festejar porque ahí siguen, al pie del cañón.