Con licencia para volar, Igor Akinfeev, es el nuevo héroe nacional de Rusia. Atajó absolutamente todo, y frenó el sueño imposible de España, una favorita más que ha entregado la sucesión a los menos impensados. Cuando el futbol desobedece, de eso va está trama en Rusia, es la gran prueba de que el diablo cita a cualquiera. Primero fue Messi, después Cristiano, ahora Iniesta, Ramos. ¡Cuidado Neymar!
Así se explica este torneo de torneos, un lugar en donde no ha existido tregua alguna. Un territorio en donde una eminencia puede salir por la puerta de atrás y un ilustre desconocido, como Igor Akinfeev, puede transformarse en un catedrático arquero.
¡El anfitrión #RUS avanza a cuartos de final!#ESP
⚽ Iniesta
⚽ Piqué
❌ Koke
⚽ Ramos
❌ Aspas#RUS
⚽ Smolov
⚽ Ignashevich
⚽ Golovin
⚽ Cheryshev#ESPRUS #Rusia2018 pic.twitter.com/D7qTRqUdhJ— Copa Mundial FIFA 🏆 (@fifaworldcup_es) 1 de julio de 2018
Akinfeev, de coladera a héroe nacional
Akinfeev (31), sin una carrera en el exterior de Europa que lo haga masivamente conocido por estas latitudes, estuvo en diversas portadas antes del arranque del Mundial, por una desastrosa razón, su “supuesta maldición” debajo de la portería. Como portero del CSKA Moscú llevaba 43 partidos consecutivos recibiendo goles en la Champions League. Un triste récord que lo convertía en la serie negativa más extensa en el famoso torneo.
El fin de la maldita racha
Igor Akinfeev terminó con la racha de al menos un gol encajado ante Benfica. Llegó el fin justo a tiempo, un mes antes del inicio del Mundial, y como en la vida, hay rachas malas y buenas también, parece ser que la mala y esos 11 años encajando al menos un gol en la Champions (11 años y 21 días), terminó en Rusia.
¡Arquero, arquero!
Igor Akinfeev es el ganador del @Budweiser #ManoftheMatch del #ESPRUS.#ESPRUS #Rusia2018 pic.twitter.com/m92Z8H3hAD
— Copa Mundial FIFA 🏆 (@fifaworldcup_es) 1 de julio de 2018
5 Goles en 4 partidos
El portero imposible de Rusia, se ha mutado en un caparazón de acero bajo el larguero ruso. La Selección ha permitido cinco goles en esta competencia. Uno le marcó Salah, 3 Uruguay, y un autogol en el partido contra España. Ninguno en la fatídica ruleta rusa de los penales, el viento sopló a su favor, y Akinfeev se mutó en un gato de 7 vidas. Rusia sigue con esperanza, la que tiene en los guantes de Igor.