En un acto de humanidad, la Real Sociedad nos dio una demostración de que fuera de la cancha son un gran equipo. A las afueras del estadio Anoeta, en la puerta 20 vivía Rubén y su perro.
Una persona sin hogar, como tantas que ha en el país ibérico desde que años atrás comenzaron las políticas de desalojos por sus leyes hipotecarias. Por lo tanto, los donostierra tomaron la decisión de darle un trabajo a señor de 35 años.
Ya no tendrá que dormir en la calle, trabajará para la @RealSociedad https://t.co/e87L4UiYd9 pic.twitter.com/prVjdHPxb8
— MARCA (@marca) 26 de octubre de 2016
Ahora, Rubén se encarga del mantenimiento de la cancha en la que juega el mexicano Carlos Vela. “Ya creía que no había gente tan buena. Después de tantos palos se pierde la esperanza”, confesó el ahora trabajador de la Sociedad al programa Los Lunes al Gol.
Su contrato es de dos meses y de ahí puede ganarse más tiempo. Así, él y su perro podrán tener un ingreso para buscar un lugar en donde dormir y dejar las calles de San Sebastián.
Rubén vivió, según sus vecinos, ocho meses como ‘homeless’. Ahora es un empleado de un equipo que nos demostró que son una gran institución.