¡A disfrutar! Después de cada edición del Super Bowl, el MVP es anunciado con bombo y platillo. Y más allá de la fiesta que se avecina con sus compañeros y afición, el elegido hace un viaje muy especial y ya tradicional en el futbol americano.
Año con año, el Jugador Más Valioso o MVP del Super Bowl aprovecha las cámaras para decir: “¡Voy a ir a Disney World!“. Al día siguiente, el parque de diversiones se llena, aunque no de turistas como es costumbre. La diferencia es que los aficionados del equipo y jugador en cuestión gozan de un desfile muy diferente.
¿Cuál es la historia detrás de la visita del MVP del Super Bowl a Disney World?
La idea surgió cuando Michael Eisner, CEO de Disney, y su esposa Jane Breckenridge cenaron con Dick Rutan y Jeana Yeager, una pareja de aviadores que recorrió el mundo entero sin escalas. Breckenridge le preguntó a los pilotos qué sería lo siguiente que harían y ellos respondieron: “Vamos a ir a Disney World“.
Con ello surgió la idea de crear la campaña ¿Y qué harás ahora?, e implementarla en el Super Bowl, la organización se acercó a la NFL para hacer la propuesta y se concretó que el MVP sería el encargado de responder la icónica pregunta después del partido.
El primero en decir que visitaría el famoso parque y protagonizar los comerciales de la empresa fue Phil Simms, mariscal de campo que ganó el Super Bowl XXI en 1987 con los New York Giants.
El resultado superó las expectativas y esto se convirtió en una pregunta tradicional para el MVP de cada Super Bowl. Hasta 2020, la visita y el desfile se llevaron a cabo con éxito, Patrick Mahomes visitó el parque y saludó a sus aficionados en Magic Kingdom.
Así como sucedió en 2021 con Brady y ‘Gronk’, hubo otras ocho ocasiones previas en las que Disney eligió a dos figuras para salir en sus spots y de acuerdo con diferentes versiones que circulan el internet, los jugadores reciben entre 30 y 50 mil dólares como recompensa económica por participar en la campaña.