Si te hablan de Matt Ryan, seguro que piensas en el Super Bowl que dejó ir pero no sabes que para llegar a la NFL, probó de todo.
Matt Ryan ha asegurado en alguna entrevista que el futbol americano lo eligió a él y no al revés. En su infancia, el hoy histórico mariscal de campo, jugó de todos los deportes pero en ninguno encontró acomodo, como en los emparrillados.
El ‘2‘ de los Falcons asistió al William Penn Charter School de Filadelfia y ahí, participó en los equipos de béisbol, baloncesto y futbol. “Jugué béisbol, baloncesto y futbol en la escuela secundaria. Me di cuenta que tal vez era mejor en el futbol, supongo que se podría decir que el futbol me eligió“, declaró en una entrevista previa al Super Bowl del 2017.
Fue así como empezó el camino de Matt Ryan en los emparrillados. Sus primeros pasos fueron más que exitosos al grado de recibir los honores del primer equipo All-City en 2002. Se convirtió en capitán de su equipo y así, comenzaron a llegar ofertas de diferentes universidades.
La elección del colegial sí fue cien por ciento de Matt Ryan y eligió el Boston College. Su debut fue en 2004 y el impacto en el equipo fue casi inmediato, pues se coronaron campeones en tres ocasiones consecutivas del 2005 al 2007.
Un año después llegó al Draft de la NFL y así, los Atlanta Falcons se lo llevaron en la tercera selección global con un contrato que incluía 72 millones de dólares.
Han sido doce temporadas las que Matt Ryan ha jugado en la NFL y en 2017 ha conseguido sus mayores logros. No sólo llegó al Super Bowl, que terminó perdiendo ante los Patriots, sino que fue nombrado el MVP (Mejor Jugador de la Temporada). En total completó más de mil yardas por aire, nueve pases de anotación y un 71.4 de porcentaje de acierto.
