El deporte nos deja historias maravillosas y de superación todos los días, como la de Josh Jacobs, corredor de los Oakland Raiders.
El jugador de apenas 21 años, vivió su temporada de novato en la NFL con los Raiders y aunque no lograron llegar a la postemporada, él no desaprovechó su primera campaña en los emparrillados. En sus redes sociales, Josh Jacobs anunció que le acababa de comprar una casa a su padre.
Blessed just bought my pops a house 🏠🤞🏽💯
— Josh Jacobs (@iAM_JoshJacobs) January 7, 2020
La infancia de Josh Jacobs no fue nada fácil. Fueron tiempos difíciles para él y su padre, al grado de verse obligados a vivir en un automóvil.
El padre de Josh, Marty Jacobs, declaró previo al Draft de la NFL del 2019 lo difícil que fue la infancia del joven corredor y dijo estar orgulloso de que haya tomado lo mejor de esa experiencia.
“Una de las cosas que me enorgullece de Josh es que siempre confió. Hay muchas situaciones que experimentó de niño y no quiere que su hijo las viva. Lloro cuando hablo de esto porque Dios me confió a los niños. Por eso estoy feliz de que Josh aceptó las cosas buenas que emergieron de lo que vivimos“, declaró en aquel momento.
Josh Jacobs fue seleccionado en el pick 24 global del Draft pero fue uno de los mejores jugadores de los Oakland Raiders en la campaña. Fue el tercer mejor corredor de la temporada regular en la NFL, tan sólo por debajo de Derick Henry de los Titans y Nick Chubb de los Browns.
En total, Jacobs corrió para mil 316 yardas y se metió en siete ocasiones a las diagonales. Por partido, Josh promedió un total de 88.5 yardas y eso que sólo tuvo participación en siete encuentros.
