Se acabó la temporada 2015 de la Liga Mexicana de Béisbol. En una serie final inédita entre Acereros del Norte y Tigres de Quintana Roo, los de bengala se quedaron con la Copa Zaachila por tercera vez en cinco años.
Juego 3: de regreso al horno
Después de haber perdido los primeros dos encuentros de la Serie del Rey, Acereros regresó al Estadio Monclova buscando su primer triunfo en la historia de la franquicia en esta instancia. Los encargados de la serpentina fueron Josh Lowey por los locales, mientras que Daniel Cabrera salió a la loma de los disparos por los visitantes. En la parte baja de la segunda entrada, José Amador, de los Acereros, se ponía en circulación con sencillo al jardín central y con esto le dejaba el turno a Hernando Arredondo quien le encontró el pitcheo bueno a Cabrera y se fue PARA LA CALLE por todo el prado izquierdo. Con la pizarra 2 – 0 en la parte baja de la tercera entrada, la lluvia se hizo presente en Monclova e impidió que el juego continuara, con esto, Tigres y Acereros tuvieron que regresar al día siguiente a reanudar lo que habían comenzado.
A las 13:00 horas del sábado 12 de septiembre, se volvió a cantar el playball en la casa de los norteños con el juego tal como se había quedado. Con esto, los managers estaban obligados a cambiar de lanzadores ya que los abridores del día anterior se habían enfriado. En la parte baja del cuarto episodio, Francisco Córdoba con un out en la pizarra, leyó el pitcheo del lanzador de Tigres, Jesse Estrada, y le propinó un TABLAZO por todo el central que terminó del otro lado de la barda para aumentar la ventaja de los locales. Ya en la quinta baja, Acereros con sencillos de Brett Harper y Hernando Arredondo, anotaron la quinta del encuentro gracias al sencillo productor de Francisco Córdoba.
Los felinos metieron las manos hasta la octava entrada. Iker Franco negoció pasaporte a la inicial, el “Fello” Amézaga conectó sencillo y con otro pasaporte, ahora para Ricardo Vázquez, empezaba a arder el rancho. Raúl Sánchez conectó sencillo al izquierdo y empujaba la primera del encuentro para la causa bengalí, Greg Golson hizo lo propio poniendo la pelota en el prado derecho empujando así la segunda y el “Chispa” Gastelum la depositó en el central para ponerle la tercera rayita al tigre y acabar siete y media entradas con la pizarra 4 – 3, todavía a favor de los del norte.
Acereros salió respondón en la parte baja de la misma octava y con base por bolas a Carlos Peñuelas, toque de sacrificio de Flavio Romero y sencillo de Olmo Rosario, tomaban una carrera más de ventaja sobre el equipo de la península. Tigres no pudo hacer nada en la parte alta de la novena y con la pizarra 5 – 3, Acereros consiguió su primer victoria en serie final en toda la historia del club.
Juego 4: el despegue
Con un día de descanso y debido al poco trabajo que tuvo Lowey en el tercer encuentro de la serie, Homar Rojas (sí, con H), manager de la furia azul, decidió enviar de nuevo al serpentinero estadounidense, Josh Lowey, a la loma de los disparos. Por su parte, Roberto Vizcarra, timonel de los felinos, decidió darle la pelota a Carlos Bustamante.
Tigres fue poniendo de a poco las rayitas en la pizarra ya que en la segunda entrada con sencillos de Alfredo Amézaga y Esteban Quiroz, anotaron la de la quiniela con un rodado al pitcher quien buscó el doble play, pero una buena barrida de Quiroz evitó la doble matanza. En la tercera entrada los sureños iniciaron el ataque con sencillo del “Chispa” Gastelum y Jorge Cantú. A pesar de que Golson fue puesto out, ayudó a que Gastelum, quien se encontraba en la segunda, con “pisa y corre” se fuera a la antesala. Con sencillo al izquierdo, cortesía de Alfredo Amézaga, Tigres anotó la segunda del encuentro.
Por tercera entrada consecutiva, el pitcheo de los norteños no pudo colgar el cero ya que en la cuarta alta con sencillo de Quiroz y vuelacercas de Eugenio Velez, les anotaban dos carreras más. Desde ese momento hasta la novena entrada, Acereros logró controlar a los bates de los reyes del zarpazo, pero momentáneamente la el marcador era 4 – 0.
Por su parte, Acereros se mantuvo apagado a la ofensiva hasta la octava entrada cuando los fogoneros de los felinos empezaron a perder la zona buena. José Amador se puso en circulación por la vía del dolor y tomó la segunda por un wild pitch. Hernando Arredondo remolcó hasta la tierra prometida a Amador con un doblete y la furia azul acortaba distancia. Antonio Lamas sustituyó a Flavio Romero a la hora cero ya que conectó hit al derecho permitiendo que Arredondo anotara la segunda para los del norte. Con hombre en primera y un out, el pitcheo de Tigres llenó las bases con dos pasaportes y Olmo Rosario empujaba la tercera carrera con fly de sacrificio al jardín derecho.
Cuando parecía que los de bengala estaban a tres outs de la victoria, José Amador se fue solito PARA LA CALLE y empataba el juego para forzar las entradas extras.
En la décima entrada, Tigres explotó a la ofensiva anotando tres carreras sin respuesta de los Acereros, por lo que al finalizar el encuentro la pizarra fue 7 – 4 y con esto lo Tigres tomaron más ventaja en la serie y se ponían a un sólo triunfo de coronarse campeones de la LMB, pero aún faltaba un juego.
Juego 5: tenemos rey
Si para quedarse la serie se necesitaban ganar cuatro juegos y Tigres estaba a sólo una victoria de lograrlo, creo que está de más decir que los reyes del zarpazo ganaron este juego y se hicieron campeones. En lo que se esperaba como un intenso duelo entre ambas novenas, terminó siendo una blanqueada de la serpentina felina a la ofensiva de la furia azul, aunque hay que destacar la gran labor monticular de Pablo Ortega quien en 6.1 entradas sólo recibió 3 hits, otorgó un pasaporte y retiró por la vía de la pólvora a un par de bateadores (o sea que los ponchó). Arturo Barradas, relevista de Tigres, lanzó de manera hermética ya que en 2.1 entradas no recibió hit, no dio base por bolas y recetó amargo chocolate a un bateador.
En cambio, la ofensiva de los Tigres se despachó con nueve carreras: dos en la segunda, cinco en la quinta y otro par en la séptima entrada.
Con esto, Tigres de Quintana Roo se corona por doceava vez en su historia (si siguen ganando de esta manera, en unos años con tantas estrellas, el escudo del equipo va a parecer más Nyan Cat que otra cosa).
Así concluye la temporada número 90 de la Liga Mexicana de Béisbol. Habrá que esperar hasta la siguiente tempo… ¡NO ES CIERTO!
Nace la Liga Invernal Mexicana
No hay que confundir con la Liga Invernal Veracruzana, ni mucho menos con la Liga Mexicana del Pacífico, el béisbol de la LMB seguirá ahora con la Liga Invernal Mexicana. El calendario será de 62 juegos, a rol corrido y tendrá el mismo sistema de competencia de la LMB. Los playoffs iniciarán en enero.
Los rosters de los equipos serán de 30 peloteros, conformados de la siguiente manera: 26 peloteros de 28 años o menos y cuatro peloteros con edad libre, todos mexicanos.
Lo más interesante de esta liga, aparte que será una liga de desarrollo para peloteros mexicanos, es el regreso de los Tigres Capitalinos. Después de 14 años de haber abandonado la Ciudad de México, el equipo de bengala regresará a la capital para jugar en la casa de su acérrimo rival: Diablos Rojos del México.
La temporada iniciará el 17 de octubre, y aunque todavía está por confirmarse el duelo, lo más seguro es que veamos al representativo de Tigres medirse ante el representativo de Diablos en el primer día de actividad de la LIM.
Los equipos quedarán conformados de la siguiente manera:
Tigres de Quintana Roo se asocia con Piratas de Campeche y jugarán en el D.F.
Diablos Rojos del México se asocia con Guerreros de Oaxaca y jugarán en el D.F.
Toros de Tijuana se asocia con Leones de Yucatán y jugarán en el estado de Guanajuato.
Rieleros de Aguascalientes se asocia con Broncos de Reynosa y Rojos del Águila de Veracruz y jugarán en Aguascalientes.
Saraperos de Saltillo se asocia con Pericos de Puebla y jugarán en Celaya, Guanajuato.
Vaqueros Laguna se asocia con Sultanes de Monterrey y jugarán en Salamanca, Guanajuato.
Que no se diga más y que se cante la voz de: PLAYBALL!