Llegó a su fin esa bella época del año a la que llamamos “Tazoniza” y fue una noche más que especial la de este lunes 10 de enero, pues los Bulldogs de Georgia acabaron con una racha de 40 años sin conseguir el campeonato y lo hicieron a costa de su verdugo… Alabama.
Lo difícil no es llegar sino mantenerse, así dice el dicho, pero Georgia ya llevaba muchos años dentro de la contienda por el campeonato, incluso en 2017 había perdido una final contra Alabama, mismo rival que enfrentaría por el campeonato en la temporada.
Y sí, los Bulldogs llegaban más como víctimas, porque el equipo del entrenador en jefe, Nick Saban, es uno de los mejores y ya lleva un ratote así. Tres campeonatos y dos finales perdidas desde 2016 lo respaldan, pero la historia y los récords son para romperse.
Con un gran juego defensivo, Georgia maniató a Alabama y no lo dejó hacer mucho, mientras su ofensiva funcionaba a la perfección. Finalmente, los Bulldogs se llevaron el campeonato a casa, uno que no conseguían desde 1980, un nuevo equipo que puede entrar a los campeones impensados.
Stetson Bennett, QB de Georgia tuvo un encuentro de 224 yardas y dos pases de anotación. El corredor Zamir White, tuvo una anotación dentro del partido y los receptores Adonai Mitchell y Brock Bowers fueron los encargados de poner puntos en el marcador.
La defensiva fue la clave del título de Georgia
Cuatro capturas fueron las que le hicieron al QB de Alabama, así que, la defensa fue la que se encargó de hacer el trabajo sucio para los Bulldogs de Georgia, pero no sólo eso, dos intercepciones fueron las que marcaron el camino a la victoria.
Kelee Ringo selló la victoria con una de esas intercepciones, cuando Alabama busca acortar el marcador en busca de un milagro, éste no llegó, pero el ala defensiva sí atrapó un balón suelto de Bryce Young y lo regresó para el touchdown.
Cuando decimos que pocos creían en que los Bulldogs pudieran hacerse con el campeonato, hablamos en serio y tras la victoria, parece que los organizadores tenían preparado desde antes la victoria de Alabama y les salió el tiro por la culata, pues fue todo lo contrario.
Nakobe Dean, uno de los defensivos de Georgia comenzó a dar entrevistas sobre ser campeón del futbol americano colegial, pero lo hizo con una gorra de campeón de Alabama. Desconocemos si fue descuido o una simple burla, pero se llevó los reflectores.