La Juventus de Maurizio Sarri fue un desastre en toda la temporada y así cerró: eliminado de la Champions League, en casa y ante el Olympique Lyon. Ni los dos goles de Cristiano Ronaldo fueron suficientes para remontar. (Acá te dejamos el nuevo récord del portugués).
La eliminación de la Champions League es el fracaso más grande de la temporada para la Juventus y Maurizio Sarri. El técnico italiano, quien llegó este año en sustitución de Massimiliano Allegri, tenía la obligación de por lo menos competir.
Cabe recordar que con Allegri, la Juventus llegó a dos finales de Champions League y aunque ambas la perdió, la ‘vara’ estaba muy alta para Sarri. Quizá un título de Coppa Italia o una Serie A digna de un campeón habrían aligerado la carga, pero no pasó ninguna de las dos cosas.
En la Coppa Italia se quedaron sin el título luego de perder en penales ante el Napoli. Mientras que en la Serie A, no encontró la regularidad cuando se reanudó el futbol y gracias a que los otros rivales fallaron, terminaron alzando el título. Tan sólo un punto los separó del Inter de Milan.
Los pecado de Sarri
Maurizio Sarri (acá te dejamos su historia) llegó con muchos señalamientos a la Juventus, por su pasado en el Napoli. Sólo estuvo un año en el Chelsea y aunque logró conquistar la Europa League, también dejó una imagen muy irregular.
La Serie A fue un calvario para Sarri y su Juventus, o al menos desde que se reanudó el futbol. Dejaron puntos en el camino en partidos que iban ganando ante Milan, Sassuolo, Roma y basaron su juego en un Cristiano Ronaldo que ya ni siquiera fue convocado en la última fecha.
Cristiano no jugó ese partido, pensando en la eliminatoria de la Champions League. Perdían sólo por un gol ante el Olympique Lyon y aunque ganaron el partido de vuelta, no fue suficiente. La permanencia de Sarri está en juego, pues suenan Nuno Espirito Santo del Wolves y Simone Inzaghi de la Lazio para reemplazarlo la siguiente temporada.