Hablar de futbol es hablar de historia y de leyendas. Hablar de futbol, es hablar de Francesco Totti. Un gladiador que nunca se rindió.

Jurar amor eterno es fácil pero hacerlo valer, sólo los valientes. Francesco Totti es recordado por su lealtad a la Roma, pero el gladiador italiano le era fiel a su país y a su pasión. Lo demostró en Alemania 2006 cuando fue campeón del mundo con Italia. Una Copa en la que fue fundamental, pero a la que casi no llega.

Francesco Totti: El gladiador italiano que no sabía rendirse
Foto: Getty Images

Roma y Empoli disputaban un partido de Serie A, cuando Totti cayó al campo. Apenas era el minuto 10 cuando un rival hizo una entrada dura y el capitán de la ‘Loba‘ cayó de fea forma al terreno de juego.

Los graves pronósticos se confirmaron cuando se dio a conocer que Francesco Totti se había fracturado el peroné. El partido se jugó en febrero del 2006, cuatro meses antes de que iniciara la Copa del Mundo de Alemania.

Totti se perdió así el resto de la temporada. Serie A, Copa de la UEFA, Coppa Italia y preocupaba en demasía el tiempo de recuperación para el Mundial. Todo apuntaba a que el ‘10romano no llegaría a tiempo y sería una sensible baja para Italia.

Francesco Totti: El gladiador italiano que no sabía rendirse
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El pronóstico para que Francesco Totti volviera a jugar era mínimo de tres meses. Es decir, hasta mediados de mayo del 2006. Sin embargo la mentalidad del gladiador lo llevó de regreso muchísimo antes. A principios de abril comenzaba a hacer trabajos con el balón.

Al final Totti se recuperó en tiempo récord porque a sus 29 años, podría ser el último Mundial que jugara. Rendirse nunca fue una opción para él.

Italia asistió al Mundial con Francesco Totti. El ’10’ de la Roma marcó el gol decisivo para que se clasificaran a los Cuartos de Final, donde enfrentaron a Ucrania. En dicho partido marcó un doblete y los italianos se medirían a la local Alemania en semifinales.

Francesco Totti: El gladiador italiano que no sabía rendirse
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En un partido que se fue a tiempos extra, una vez más Totti fue fundamental para llegar a la final. Italia venció en penales a Francia y conquistó su cuarto título mundial, el último que han conseguido.

La lección que dejó Francesco Totti fue la de nunca rendirse. Obstáculos hay siempre. Si no, la vida sería aburrida. Sólo hay que saber tomarlos de la mejor manera.

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