Huele a título en Stamford Bridge. En el que era quizá el partido más complicado que le restaba al Chelsea en el calendario, los Blues dieron una muestra de poderío. El Chelsea derroto 3-0 a domicilio al Everton de Ronald Koeman y va derechito rumbo al campeonato de la Premier.
Durante el primer tiempo realmente no pasó mucho, de hecho los porteros parecían dos espectadores más. Pero eso estaba bien para el Everton, a fin de cuentas los Toffees estaban enfrentando con un auténtico peso pesado de la Premier League.
Fue hasta la segunda mitad cuando el Chelsea despertó y el Everton no pudo contener la explosión de los Blues. Primero fue Pedro Rodríguez quien abrió las puertas para el triunfo de los de Antonio Conte. Pedro disparó de fuera del área y clavó el balón en el ángulo, dejando a Martin Stekelenburg sin oportunidad.
Tras el gol del delantero español, el Chelsea se acordó que tiene una gran ofensiva y se lanzó al ataque. Los Blues consiguieron el segundo tras un balón parado. Eden Hazard cobró raso un tiro libre, Stekelenburg no pudo atrapar el disparo, le rebotó el balón a Gary Cahill y así llegó el segundo del Chelsea.
Willian puso el último clavo en el ataúd de los Toffees. Diego Costa se combinó con Cesc Fábregas para una buena pared, el español quedó mano a mano dentro del área frente al portero y retrasó el balón para llegad de Willian, quien sólo tuvo que empujar la pelota.
Con este resultado, el Chelsea se consolida en la cima de la tabla y pone siete de distancia entre ellos y el Tottenham, aunque claro a los Spurs les falta jugar su partido de esta jornada. El Chelsea ya cumplió, ahora toca ver silos de Harry Kane hace lo propio o ya mejor nos preparamos para que los de Conte reciban el título.
