Parecía un día normal en la vida de unos jóvenes integrantes del Houston Dynamo de la MLS, cuando de pronto, mientras planeaban en casa de quién se echaban la reta del FIFA, apareció el ídolo del mundo, el mejor jugador del orbe: Lionel Messi, quien estaba frente a sus ojos.
No daban crédito a lo sucedido hasta que el astro argentino se dio cuenta de su asombro y de inmediato fue a saludarlos y a darles un abrazo para que sigan motivándose.
Los muchachos quedaron atónitos frente al momento pues su máximo ídolo les estaba haciendo caso y hasta pudieron cruzar palabra con él; sin duda, no se han bañado desde entonces.
Aquí el mágico momento del día: