Los premios Puskas ya tienen sus contendientes para conocer el “Mejor Gol de Año”, pero se acaba de marcar uno que podría entrar sin problemas en la terna finalista.
Walid Atta, que juega en el Gençlerbirliği turco, estaba en un entrenamiento y marcó un gol de rebona que los va a dejar con el ojo cuadrado.
Esto es algo similar a lo que ha hecho Ángel Di María en algún momento de su carrera, un hombre considerado el mejor “rabonista” del mundo.