Las conmociones cerebrales son el tema más delicado que hay en la NFL. Cientos de jugadores retirados y activos han sufrido las consecuencias del mal tratamiento de este problema. La liga ha intentado disminuir y prevenir las conmociones, pero hasta ahora siguen saliendo casos y casos.

El último es de uno de los más grandes jugadores de la historia. La esposa de Tom Brady, Gisele Bündchen, declaró que su maridos sufrió una conmoción el año pasado. En el programa de Charlie Rose en la CBS la modelo explicó el asunto.

Rose preguntó sobre la petición de Gisele a Brady para que se retirara. Entonces, la brasileña contestó: “La cuestión es que como esposa piensas que es un deporte agresivo. Tuvo una conmoción el año pasado, tiene muchas conmociones, pero no hablamos de eso, pero sí las tiene. No creo que sea sano que pases por este tipo de agresiones todo el tiempo. Yo espero tenerlo sano y como está hasta que tengamos 100 años”.

El problema aquí es que a Tom jamás se le vio en el reporte médico de los New England Patriots. El mariscal de campo no jugó cuatro partidos, pero fue por suspensión, no por lesión. Es más, según Stats Pass Brady jamás ha estado en el reporte de los doctores por este tipo de problemas. Por lo tanto, esto podría ser investigado por la NFL y ver qué fue lo que realmente pasó. Asimismo, estas declaraciones no hicieron eco. La franquicia no ha respondido estos comentarios de ninguna manera.

Ahora, queda ver si esto trae consecuencias para los Pats y para el QB. Como es el comisionado, Roger Goodell, no duden que lo vuelvan a castigar.

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