Los seguidores del Barcelona quería a Ronald Koeman, Jürgen Klopp, Jorge Sampaoli o hasta Claudio Ranieri. Sin embargo, la directiva culé decidió que el hombre ideal era Ernesto Valverde.
A lo mejor su nombre te suena, a lo mejor no. Lo que sí es que no ese de esos entrenadores de gran renombre que se podía esperar para el Barça. Claro, esto no significa que sea un total desconocido o que sea mal entrenador.
Valverde viene de dirigir al Athletic Club. Desde el 2013 acumula 103 victorias, que son muchísimas para un club que no cuenta con la billetera de otros en España. Ganó una Supercopa de su país en 2015 y llegó a una final de Europa League, en el 2012.
Claro, ese no es su único título. Cuando dirigió en Grecia al Olympiacos ganó cinco trofeos en un lapso de cuatro años.
Además fue futbolista en su juventud. Debutó con el Alavés, jugó para el Espanyol y ¡oh, sorpresa! también defendió los colores del Barcelona. Así, no es un desconocido ni de la ciudad ni la responsabilidad que es estar en el club blaugrana.
Como entrenador se le ha vinculado a varios equipos, pero no dejaba a los Leones. Ahí se desarrolló como estratega, desarrolló muy buenos futbolistas y hasta se ganó el premio al mejor en su puesto en el 2014.
Según los expertos, tiene un estilo de juego muy bueno. Llamativo, que propone y ataca se adapta a la filosofía culé. Con 53 años de edad, los mandamás del Barça quieren que él sea la solución.
Ese es Ernesto Valverde, al menos ante el público y los números. Solo falta que se haga el anuncio, pero el nacido en la provincia de Cáceres tendrá mucho trabajo por delante. Claro, y al equipo más talentoso que haya tenido en sus manos.
