Kansas City llegó a la Semana 11 de la NFL con la única convicción de vencer a los Chargers y lo consiguieron, siendo Dontari Poe quiene comenzara a orquestar dicho triunfo en una jugada de ensueño.
El liniero defensivo de los Chiefs fue colocado en una jugada ofensiva para intentar romper la muralla de San Diego y lo consiguió para sumar seis puntos y un récord histórico.
Poe corrió una yarda, movió el marcador y rompió la marca del jugador más pesado en anotar touchdown por tierra, al pesar 157 kilos.
Este récord le pertenecía a William Perry, quien en su época con los Chicago Bears movió sus 152 kilos para romper el plano y anotar para su equipo.