La difícil situación que vive el mundo en general, pero sobre todo México y Estados Unidos tiene en shock a gran parte del país y el futbol no es la excepción. Mucho se ha dicho que el futbol mexicano es una de las ligas que mejor paga en el continente americano, pero eso no quiere decir que sea la de la que tiene la economía más estable.
Cada torneo escuchamos de equipos con problemas de salario, quién no recuerda aquel escándalo de Amado Yáñez y Oceanaografía cuando el ‘empresario’ era dueño del Querétaro y no le pagaba a los jugadores, pese a que Yáñez fue juzgado por las autoridades la falta de pagos en el futbol mexicano no se resolvió. A tal grado que esta semana la Liga MX confirmó que obligará a los López Chargoy a vender a los Jaguares de Chiapas (por fin).
Lamentablemente, debido a la devaluación del peso frente al dólar la economía no sólo de jaguares sino de todos los clubes mexicanos se ha visto afectada. Los equipos suelen hacer contratos en dólares, pagan en dólares las cartas de los jugadores y los sueldos (sobre todo de los extranjeros) también; sin embargo sus ingresos por concepto de venta de boletos y souvenirs los reciben en pesos. Los patrocinadores pueden adaptarse a pagar en moneda nacional, y los jugadores también a firmar contratos en pesos, pero si hay alguien que no se va a adaptar es el mercado internacional.
Por poner un ejemplo y tomando como base las cifras de Transfermarkt y las cotizaciones de x-rates, la transferencia de Agustín Marchesín de Lanús a Santos en 2015 costó 4.68 millones de dólares, en aquel momento el dólar estaba a 16.51, es decir que: 4.68×16.51=77.26. Hace dos años Marchesín le costó 78 millones de pesos a Santos. Esa misma transferencia con el precio actual del dólar (21.45 pesos al momento de redactar esto) tendría un costo de 100.386millones, es decir que Santos hubiera pagado más de 100 millones de pesos por el guardameta.
Martín Rodríguez llegó a Cruz Azul este año por una cifra de al rededor de los 3.31 millones de dólares (un millón trescientos mil dólares menos aprox. que Marchesín a Santos); sin embargo la nueva cotización del dólar hizo que el gasto de la máquina superara los 70 MDD. Rodríguez costó 71.10 millones de pesos (3.31×21.45) o sea casi lo mismo que Marche por quien en teoría se habría pagado mucho más.
Ante tal situación los clubes se han visto obligados a tomar otras medidas como lo declararon varios directivos del futbol mexicano a ESPN. Una de las primeras políticas que podrían sanear la economía de los clubes mexicanos es conseguir jugadores en el mercado local (que se maneja en pesos) eso representaría voltear a ver a sus fuerzas básicas.
Por poner un ejemplo, supongamos que a Toluca le hace falta un extremo derecho y tiene 50 millones de pesos para cubrir esa posición. Los ‘Diablos’ van al mercado internacional y encuentran varias opciones que cuestan tres millones de dólares, cifra que hace unos años eran 49.53 MDP, cantidad perfectamente costeable para los ‘Choriceros’. Hoy esos mismos tres millones de dólares son 64.35 MDP por lo que Toluca no podría comprar al jugador y debería encontrar entre sus fuerzas básicas al futbolista que cubra esa posición.
“La solución para nosotros, porque la situación del dólar nos preocupa a todos, hablo incluso a nivel individual, porque todo sube, pero creemos que la respuesta a esto es la inversión en fuerzas básicas, la apuesta por jóvenes mexicanos, por formar jugadores. Es la respuesta para casi todos esos problemas” declaró Marco Garcés, directivo del Pachuca a ESPN.
La fuerzas básicas no son simplemente la solución a un problema económico nacional, sino también un negocio en el que si haces las cosas bien tu inversión se ve recuperada con resultados deportivos y económicos. El Pachuca fue campeón hace poco más de seis meses y además han vendido (y bien vendidos) a Jürgen Dam y Rodolfo Pizarro, a este último lo vendieron en 10.5 millones de dólares en diciembre del año pasado.
Es verdad que si eres un ‘crack’ vas a sobresalir te pongan los extranjeros que te pongan, pero el desarrollo del jugador del futbol es un proceso y si un joven no juega se va estancar. Es triste que jugadores como Luis ‘Chaka’ Rodríguez terminen calentando la banca en Tigres mientras jugadores como Jefferson Cuero (10 goles en dos años) siguen dando lástima en equipos como Morelia y ni que decir de Yorleys Mena que estuvo un año con los Monarcas y lo mejor que hizo fue esto:
Algunos creen en el karma, otros dicen que cosechas lo que siembras y otros que todo lo que haces tiene consecuencias, pero al parecer a la Liga MX se le va a regresar lo de la Regla 10/8 debido a una crisis económica. Es triste, pero ya veremos si así voltean a ver a los jóvenes.
** Fotos: MEXSPORT
