Lo que necesitas saber:
El padre de DeAndre Hopkins murió en 1992, cuando el receptor de Chiefs era solo un bebé
DeAndre Hopkins cumplirá una emotiva promesa en el Super Bowl 2025. El jugador de los Chiefs vestirá una chamarra especial el 9 de febrero, una que le heredó su padre antes de morir hace más de 30 años.
DeAndre Hopkins usará chamarra en honor a su padre en el Super Bowl 2025
Y es que el Super Bowl es un escenario único en la vida de todo jugador de la NFL. Todo es especial ese día, incluso el atuendo con el que los jugadores llegan al partido.
Por eso, previo al gran juego es muy común preguntarle a los jugadores qué se pondrán ese día, y lo que respondió DeAndre Hopkins cuando vino su turno se llevó el momento emotivo de la noche.
Contó que su padre le dejó una chamarra antes de morir, lo cual ocurrió en 1992, cuando él era solo un bebé. Se trata de un abrigo de mink que le gustaba mucho y con el que solía pasear en auto por el vecindario donde vivían (según un reportaje de ESPN publicado en 2019).
“Mi papá murió en 1992 y me dejó un par de cosas: Una de las que me dejó fue una chamarra de mink y siempre dije que usaría esa prenda en mi boda o en el Super Bowl, lo que sucediera primero; obviamente no estoy casado… Usaré la chamarra de mi papá”, fueron las palabras de DeAndre Hopkins en las conferencias previas al Super Bowl 2025 entre Eagles y Chiefs.
DeAndre Hopkins y una historia de superación sin su padre
El ya citado reportaje cuenta que el padre de DeAndre Hopkins era bueno y amable a pesar de enfrentar un proceso por venta de drogas. Estaba libre bajo fianza cuando murió, con la posibilidad de ser condenado a muchos años de prisión.
Murió en un accidente automovilístico por una fuerte lluvia que provocó que el auto resbalara y DeAndre Hopkins solo conoció detalles sobre él por anécdotas de su madre y otros familiares.
Pero no solo fue la muerte de su padre, el receptor de los Chiefs también enfrentó una tragedia con su madre, quien fue atacada con ácido por Savannah Grant en un ataque de celos. Perdió la vista aquel día, pero eso no impide que lo acompañe en sus juegos en la NFL.
DeAndre Hopkins jugará su primer Super Bowl, luego de llegar a los Chiefs en el transcurso de la presente temporada. En Texans, Cardinals y Titans sus posibilidades de jugarlo eran remotas, pero ahora podrá usar la chamarra de su padre en el Superdome de Nueva Orleans.