El fichaje de Dani Alves con Pumas ha provocado un revuelo espectacular en la Liga MX y todo el futbol mexicano. Pero más allá de una visita de domingo al Estadio Olímpico Universitario, el domingo 7 de agosto pasará a la historia por la visita del equipo auriazul al Barcelona, en el Camp Nou.
Hasta hace unas semanas, Dani Alves portaba la camiseta del Barça y se trata de una de sus leyendas. El futbolista con más títulos en la historia de este deporte regresó a la que fue su casa, ante la afición que lo vio triunfar y que sigue valorándolo como ídolo.
Y como era de esperarse, el Barcelona rindió homenaje al hoy jugador de Pumas. Dani Alves arrancó el partido como titular; sin embargo, antes del silbatazo inicial se dio la entrega de una playera muy especial, acompañada de una ovación espectacular.
El cálido recibimiento y homenaje a Dani Alves en el Camp Nou
Como ya se esperaba, Andrés Lillini mandó a Dani Alves de inicio y desde el calentamiento, hubo muestras de cariño entre el futbolista y la afición. Mientras la gente coreaba su nombre en las tribunas, el brasileño señaló su corazón e hizo un emotivo gesto para entregarlo.
Unos minutos más tarde, Alves pudo saludar y abrazar a todos sus excompañeros; entre todas esas sonrisas, apareció también el presidente Joan Laporta, quien le entregó un reconocimiento. Sergio Busquets lo acompañó junto a la playera con el número 431, representando los partidos que jugó con el Barça.
Más aplausos, ovación y agradecimiento por parte de Dani Alves. El lateral alzó los brazos, mandó besos a la tribuna y volvió a los vestidores. Por ahora, el partido ya es goleada y por acá te dejamos los goles del Barcelona.
Salida de cambio y más ovaciones
Lillini decidió darle descanso a Dani Alves y sacarlo de cambio al minuto 60. La afición aprovechó una nueva oportunidad para corear su nombre y ovacionarlo, pero eso no fue todo. Excompañeros, Xavi y su cuerpo técnico también reconocieron al brasileño.
Acto seguido y después de chocar la mano con su entrenador actual, Alves se fundió en un abrazo con Xavi; de inmediato, pasó por la banca del Barcelona para saludar a la gente con la que compartía vestidor hace poco.
