El caso de Dani Alves continúa con la investigación mientras él está detenido en la cárcel. La defensa del exjugador de Pumas ha sufrido cambios y el objetivo es el mismo: probar su inocencia. El problema es que todas las pruebas conformaron un caso sólido, en el que el mismo lateral se contradijo en más de una ocasión.
Después de más de una semana en prisión, el futbolista brasileño está adaptándose a su nueva rutina. De acuerdo con La Vanguardia, esto incluye seguir jugando futbol con otros reclusos; sin embargo, se dice que está consciente de lo que vive y que declaró en una entrevista que “el futbolista se ha quedado fuera y el Dani que está aquí es uno más“.
Pero eso no quiere decir que Dani Alves quiera pasar más tiempo en la cárcel. La defensa que ahora cuenta con el abogado Cristóbal Martell confía en que pueda salir en aproximadamente un mes. Esto es un estimado suyo y para lograrlo, preparan un caso sólido y aparentemente sin contradicciones.
Así buscarán que Dani Alves salga de prisión
Después de explicar que Dani Alves cambió sus declaraciones para ocultar la infidelidad a su pareja, la defensa considera tener puntos a su favor; por ejemplo, quieren apelar la prisión provisional. Asimismo, analizan las pruebas para presentarlas a su favor.
El Mundo reveló que el argumento principal se presentaría con las cámaras de seguridad en la discoteca Sutton. Asimismo, expondrán que Dani Alves tiene toda la intención de colaborar en el caso. Con tal de que salga de Brians 2, propondrían entregar su pasaporte, pagar una fianza alta, tener prohibido salir del país e incluso visitar el juzgado constantemente.
“Creen que hay algunas evidencias que apuntalan la versión de Alves de que las relaciones fueron consentidas o que cuestionan en buena parte el relato de la víctima. Una de ellas, según fuentes judiciales, es la propia distribución de la sala VIP, conocida como ‘La Suite’, en la que sucedieron los hechos“, publica el portal.
Asimismo, se explica que el acceso a esa sala puede ser directo por el estacionamiento; si se quiere entrar ya en la discoteca, existe una puerta clandestina cerca del DJ y al subir unas escaleras. El argumento es que el baño donde habría ocurrido la agresión se encuentra abajo y cerca de la salida.
Y la defensa de Dani Alves quiere probar que él no abandonó el lugar tras salir del baño, sino que fue a la barra y volvió a encontrarse con la víctima en otra sala.