Ha sucedido lo inevitable, a partir de hoy el conflicto entre Colin Kaepernick y la National Football League se tendrá que resolver con abogados de por medio. Se ha confirmado que el exmariscal de campo de los San Francisco 49ers demandó a la NFL por “conspiración”.

La temporada pasada Kap inició unas protestas en contra de la violencia y la discriminación racial en Estados Unidos. Su manera de manifestarse fue hincarse durante la entonación del himno nacional. Eventualmente muchos jugadores en todos los deportes se fueron sumando a las protestas del quarterback. Al final de la campaña el pasador fue cortado por San Francisco y desde entonces no ha tenido trabajo.

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Las protestas iniciadas por Kap fueron objeto de una dura crítica por parte de los simpatizantes de la derecha estadounidense; de hecho Donald Trump ‘le exigió’ a la NFL que despidieran a todo aquel que se arrodillara durante el himno. Esto no pasó pero la liga tampoco se pronunció a favor de el ex qb de los niners ni de los demás jugadores que se hincan.

Ahora, Mark Geragos, abogado de Colin Kaepernick, ha confirmado que el jugador demandó a la liga por “conspiración”, pues consideró que al pasador no se le contrata debido a motivos políticos y no a motivos deportivos. Kap no es el mejor mariscal de la liga, pero sin duda sí es mejor que algunos como Brandon Weeden (contratado por los Titans tras la lesión de Marcus Mariota). El representante legal del expasador de San Francisco sentenció que el activismo de su cliente es la causa de que este no tenga trabajo.

Han conspirado para privar al Sr. Kaepernick de sus derechos de empleo en respuesta por el liderazgo y activismo del Sr. Kaepernick por la igualdad y justicia social y por la atención que le ha dado a instituciones que impiden la igualdad racial en Estados Unidos.

El abogado de Kap consideró que las presiones de Trump para que los jugadores no se manifiesten y no ejerzan su derecho a la libertad de expresión, ya que “ofenden a la bandera”, regresan a Estados Unidos a “sus días más oscuros”.

Si la NFL permanece como una meritocracia, entonces, los principios y las protestas pacíficas en las que los dueños por sí mismos hicieron un gran teatro al imitarlas hace una semana, no deberían ser sancionadas y a los atletas no se les debería negar la posibilidad de ser empleados con base en la provocación política y partisana por el Poder Ejecutivo de nuestro gobierno… Tal precedente amenaza a todos los patrióticos estadounidenses y nos regresa a nuestros días más oscuros como nación. Proteger a todos los atletas de dichas confabulaciones es lo que llevó al Sr. Kaepernick a presentar esta denuncia.

La Asociación de Jugadores de Futbol Americano Profesional (NFLPA por sus siglas en inglés) se pronunció en favor de Kaepernick. Por lo pronto, el litigio será primero entre dos entes privados y no si se resuelve ahí, se trasladará a los juzgados oficiales de EEUU.

Si Colin Kaepernick logra demostrar que efectivamente no ha sido contratado debido a que los propietarios de los equipos han “conspirado en su contra”, las consecuencias pueden ser tremendas para la NFL pues de inmediato se abriría la puerta para que se haga otro contrato colectivo de trabajo en el que los jugadores tendrían la sartén por el mango. El asunto es que para que el mariscal pruebe que hubo una confabulación, necesita demostrar que los dueños se reunieron con el propósito específico de ponerse de acuerdo para no contratar a Kap.

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