DeAndre Jordan es bien conocido por su juego defensivo y su poder cerca del aro, pero definitivamente nunca ha sido bueno para los tiros a distancia y lo demostró.
En la dolorosa derrota de Los Angeles Clippers ante los Portland Trail Blazers, donde además se lesionaron Blake Griffin y Chris Paul, el pívot nos regaló dos de los peores tiros libres que verás en tu vida.
La verdad, a nadie sorprendió lo mal que cobró Jordan, pues en la temporada regular tuvo 471 intentos, pero sólo anotó 187 de ellos.