La ultraintolerancia de aquellos que creen que los colores de su equipo son la sangre y la violencia tiene al borde de la muerte a su nueva víctima. Está vez, un fanático de Tigres. Rodolfo Manuel Palomo Gámez, sufrió la suerte de un especie de criminal de guerra atrapado por el enemigo, en el amanecer del Clásico Regio.
Golpeado hasta dejarlo en estado de coma, el hincha de Tigres tuvo el infortunio de quedarse sólo en una batalla salvaje entre dos facciones extremistas de la terquedad y la intransigencia, que se piensan que el futbol les pertenecen porque de vez en vez, disfrazados de aficionados, cantan alguna que otra canción del equipo, que según ellos, representan.
¡Patrañas! Hitler jamas necesitó emisarios, más bien que acabaran con él.
Así que estos embajadores de la estupidez y el cinismo, recorren los caminos de los estadios de futbol por amor a la guerra y en complicidad con los clubes y las autoridades.
El domingo mientras una decena de ‘valientes’ seguidores de Rayados decretaban el peor juicio para un hincha del equipo rival, la policía siempre en la luna, replegó sus miedos y decidió; “patitas para que te quiero”. Los encargados de imponer el orden fueron los primeros en huir.
Y ya no digamos de Tigres, Monterrey y La Liga MX, que están más ocupados tratando de tapar la violencia con un dedo que poner las cartas sobre la mesa. ¿En que momento el futbol se convirtió en una guerra cruel y violenta?
“Lo que se acordó en la junta previa se cumplió, la seguridad de los aficionados en el estadio y en la zona circundante, se cumplió. Debemos tener muy claro que esto fue a una distancia considerable del estadio”, declaró el presidente de la Liga, Enrique Bonilla en palabras para TDN.
Lo cierto es que en cada episodio, la violencia se supera a sí misma. Es como si cada que se esperara una fiesta del futbol, los demonios de este deporte sacaran a pasear a sus esbirros para dañar este infinito credo.
El futbol está manchado de sangre, pero también de corrupción, de intereses personales, de patrocinios que prefieren las ganancias, a la salud de un deporte que se muere entre golpes, bombas molotov y un fanatismo estupidamente mal entendido.
Estos han sido los casos de violencia en la Liga MX
1.- Violencia en las tribunas del Pirata Fuentes, Veracruz vs. Tigres (2017)
La poca tolerancia a perder provocó que tras el tercer gol de Tigres sobre Veracruz, desencadenó que la afición de los escualos protagonizara una pelea contra los seguidores de los felinos. Los de la barra de los Tiburones cruzaron las gradas para encararse con la afición visitante, misma a la que agredieron con golpes, el propio técnico de Tigres, Ricardo Ferretti se encaró con los fanáticos de Veracruz quienes también lanzaron botellas al campo cuando el equipo ya se dirigía a los vestidores.
2.- La sangre corrió en el América-Chivas del 2016
Durante el partido de ida de Cuartos de Final entre Águilas y Chivas, la violencia tocó la puerta en las tribunas y afuera del Estadio Azteca.
En las tribunas, aficionados de ambos clubes se enfrascaron en una riña. Fuera del inmueble, un fan del Rebaño fue brutalmente agredido, inconsciente en el piso y con sangre a su alrededor.
@SSP_CDMX @hiramalmeidae @ManceraMiguelMX Que opinan del abuso de autoridad por parte de sus elementos de la policía auxiliar, terrible! pic.twitter.com/4WLnrhUDpz
— Alan Zetina (@Zetina1_) 25 de noviembre de 2016
3.- Invasión de cancha en el Chivas Vs. Atlas
Era la liguilla del Clausura 2015, Atlas era goleado por Chivas 4-1, por lo que aficionados de los Zorros invadió la cancha para golpear a sus jugadores, y cuerpo técnico, en el Estadio Jalisco.
4.- Tigres vs Santos (Clausura 2016)
Luego de que Santos perdiera en casa durante el partido frente a Tigres en la Jornada 15 del Clausura 2016, los aficionados desataron una pelea campal. Esta riña dejó alrededor de 22 detenidos.
No hay duda las barras tienen el control del futbol mexicano.
