Aunque la dupla conformada por Max Verstappen y Checo Pérez es lo mejor que le ha pasado a Red Bull, Christian Horner tiene clara una cosa: la escudería está por encima de cualquier piloto. Así lo dejó ver en una reciente entrevista donde no dudó en poner las cosas “en su lugar”.
¿Ya ves que mucho se ha discutido si Max debe seguir siendo la prioridad en Red Bull o si ya es hora de aceptar que Checo también puede ser campeón de pilotos? Bueno, Horner está muy feliz con tener tal nivel de competencia interna, pero asegura que siempre se buscará lo mejor para el equipo.
La prioridad en Red Bull siempre será Red Bull (no Checo ni Max Verstappen)
El jefe de equipo de Red Bull aseguró en entrevista con Bloomberg TV (según palabras retomadas por Marca Claro) que sí, está muy chido que Checo y Verstappen estén en tan buen nivel, pero que se debe tener cuidado con eso de la ambición deportiva de ambos, pues pueden pasar a perjudicar los objetivos de la escudería.
“Es un agradable desafío, pero en última instancia son parte de un equipo. No es ‘Sergio Pérez Racing’ o ‘Max Verstappen Racing’, es Red Bull Racing. Ellos trabajan para el equipo, tienen una responsabilidad, conducen los monoplazas que alrededor de 800 empleados diseñan y producen para ellos”, declaró Horner sin empacho alguno.
Además dejó claro que las aspiraciones de Red Bull como equipo siempre serán las que encaminen las estrategias: “Son un eslabón en la cadena, un eslabón muy importante, pero es vital que sean conscientes de que la ambición del equipo es más importante que la de ellos“.
Horner siente que este año pueden ganar el campeonato individual y de equipos
Christian Horner también habló sobre la lucha que les está dando Ferrari esta temporada. Dice que cuentan con dos pilotos “maravillosos” que seguro le permitirán a Red Bull revalidar el título invididual de Verstappen, así como alcanzar el título por equipos que el año pasado quedó en manos de Mercedes.
Red Bull se llevó el último Gran Premio de la temporada con la victoria de Checo en Mónaco, pero fue en el GP de España donde comenzó la polémica por saber cuál piloto debía ser prioridad. Ese día el mexicano tenía todo para quedarse con el primer lugar, pero la instrucción fue que Max se llevara la victoria.