El segundo partido de los Cleveland Indians y Chicago Cubs por la búsqueda de la tan ansiada Serie Mundial hizo acto de presencia.
El día de ayer, Corey Kluber hizo un partidazo y guió a los Indians a la victoria en el primer encuentro. El equipo rival no pudo hacer nada desde el inicio, ya que la experiencia de Jon Lester en postemporada y en Serie Mundial no funcionaron y se vio reflejado en una de las peores noches de su carrera.
Sería difícil conseguir un mejor resultado que el de Kluber, pero Terry Francona empleó a otro de sus mejores hombres y esperaba salir victorioso de entrada: Trevor Bauer. Él se arriesgó y apostó por sus lanzamientos, puesto que sus 12 disputas ganadas en temporada regular le ayudaron a respaldar su puesto. Jake Arrieta estuvo en la loma de los Cubs en la primera. En su bolsa tenía 18 conquistas con efectividad de 3.10.
Sin embargo, la sorpresa de la noche llegó inmediatamente. El rival no quería salir con ceros en la primera y Anthony Rizzo completó su vuelta entrando caminando en la caja, después de un sencillo que Kris Bryant conectó. Chicago respiraba y se ponía adelante para el inicio de la segunda.
Además, no había ningún problema para Arrieta, que tras 35 lances estaba como si nada en el centro del diamante. Comparando sus lanzamientos con Bauer, quien ya tenía 70 y había permitido dos carreras, estaba haciendo un gran juego. Eso lo supo aprovechar correctamente el contrario y justo antes de darle fin a la baja de la tercera, Kyle Schwarber también supo registrarse.
El juego de Arrieta fue superior en todos los sentidos, pero el doble de Kipnis para conseguir la única carrera de Indians al final de la sexta marcaron su salida. Fue sustituido por Mike Montgomery, debido a que la ofensiva de Indians no presentaba ningún problema.
Sin mejores movimientos en el último tercio de juego, el partido terminó y los Cubs consiguieron empatar la serie. Siguen con vida y demuestran que no se van ir sin pelear a muerte su esperado y añorado campeonato.
El tercer juego de la justa y el primero en Chicago se realizará el viernes dentro del Wrigley Field, a las 7 pm.