Checo Pérez se ha convertido en el mejor aliado de Max Verstappen y en la pieza que necesitaba Red Bull, pues ha aceptado su rol secundario en la escudería, pero también el mexicano le ha sacado provecho en lo personal, a pesar de los altibajos de las últimas carreras, pues ya consumó su mejor temporada en Fórmula 1 después de meterse el podio en el Gran Premio de Turquía.
Antes de comenzar la campaña, Checo avisó que necesitaría cerca de cinco carreras para adaptarse al RB16B y lo cumplió, pues en la sexta ganó su primera carrera y en la séptima acompañó a Verstappen en el podio. Aunque tuvo una racha negativa a la mitad de la temporada, el tapatío se reencontró con los puntos desde el Gran Premio de Países Bajos.
Red Bull le ha dado armas
Checo tiene números similares a Daniel Ricciardo en su última temporada con Red Bull después de 15 carreras con un total de 128 puntos, que es la mejor producción del mexicano desde su llegada a Fórmula 1, en 2011, por lo que de esta manera justifica el hecho de que la escudería renovara su contrato, aunque a Pierre Gasly no le guste.
La mejor campaña de Checo había sido la del 2020, con Racing Point, escudería con la cual hizo un total de 125 puntos, con los cuales terminó cuarto en la clasificación de pilotos, por detrás de Lewis Hamiton, Max Verstappen y Valtteri Bottas.
La mejor temporada de Checo en F1
El siguiente reto del mexicano es apretar a los Mercedes y mejorar su punto débil, que son las sesiones de calificación, así como hacer su mejor actuación en el Gran Premio de México, donde su mejor posición ha sido el séptimo sitio, en 2017 y 2019.