Checo Pérez se llevó la victoria en el Gran Premio de Azerbaiyán con una gran ventaja sobre Max Verstappen y el resto de la parrilla, pero no todo fue tan fácil. El piloto mexicano tuvo cierta presión por parte de su compañero y tuvo que encontrar la manera de alejarse poco a poco.
Aún así, hubo momentos de tensión y nervios en el circuito de Bakú. Checo aceptó que pudo perder el liderato de la carrera en Azerbaiyán al pasar muuuy cerca del muro en la curva 15, aunque afortunadamente mantuvo el control del auto para seguir adelante.
Además, para Checo Pérez fue importante imponerse ante Verstappen de manera limpia en Azerbaiyán, considerando lo sucedido entre ambos recientemente. La carrera tuvo un safety car que terminó beneficiándolo y aceptó que la presión de Max representó todo un reto durante un buen rato.
“Realmente todo salió bien para nosotros. Hemos aprendido y manejado las diferencias, hoy lo demostramos. Conseguimos mantenernos en el tren de DRS y contuvimos la presión de Max, creo que tuvimos mejores neumáticos en el primer stint. Se veía bien desde ahí. Luego llegó el safety car y nos agrupó a todos, así que fue prácticamente otra carrera con neumáticos duros.
“Creo que estuvimos muy cerca, empujamos al máximo hoy. Los dos nos acercamos al muro algunas veces, así que presionamos ahí afuera. La manera en que Max me presionó durante toda la carrera fue muy difícil, pero encontramos la manera de mantenerlo bajo control“, declaró Checo en la entrevista post carrera de Azerbaiyán.
Limitar errores, la clave de Checo Pérez en Azerbaiyán
Ya con la tranquilidad de haber ganado, Checo Pérez remarcó la importancia de no regarla en Azerbaiyán, un circuito que suele dejarnos varias banderas rojas: “Era fácil cometer un error. Íbamos muy al límite y un poco que te pasaras o una equivocación pudo haber terminado con la carrera con alguno de los dos“.